Monitor Cambiario Semanal – Se aleja el cumplimiento de la meta de reservas

Claves de la semana cambiaria

  • El BCRA sigue perdiendo reservas, con una liquidación del agro por el piso. En la semana, la autoridad monetaria hilvanó 13 ruedas en rojo y totalizó ventas netas en el MULC por USD 285 M, acumulando en febrero un rojo de USD 435 M (vs +USD 8 M en 2022) y USD 625 M en lo que va de 2023 (vs -USD 130 M el año pasado). Como venimos anticipando, los antecedentes muestran que el panorama cambiario en febrero suele ser más desafiante que en enero: en 15 de los últimos 20 años el saldo neto del BCRA en el MULC fue peor en febrero que en enero. Sumado a esto, la marcada caída en la cosecha de trigo, los adelantos en las ventas de soja en diciembre y el incentivo del sector a retener a la espera de una nueva edición del “dólar soja” inducen un desplome en la liquidación del agro tras el peor enero desde 2006: en lo que va de febrero el promedio diario de ventas asciende a apenas USD 30 M vs los USD 140 M del mismo lapso de 2022 (-80%). Así, febrero se perfila para mostrar la mayor venta histórica de reservas para este mes y crecen las chances de un próximo “dólar soja 3.0” para cumplir con la meta de reservas del 1T.

•Se acelera la inflación, ¿se tocan las tasas? El próximo martes INDEC dará a conocer la variación del IPC Nacional de enero, el cual, a juzgar por nuestra medición y las proyecciones del mercado, habría enseñado una aceleración respecto a diciembre, la cual se sostendría en febrero. Entendemos que frente al costo cuasifiscal implícito y al “colchón” de tasa real positiva que ha venido manteniendo, el BCRA decidirá mantener inalterada la tasa de interés de política económica (+6,3% m/m de TEM). No obstante, de persistir la inflación en estos niveles, y frente a los desafíos que enfrentará el frente cambiario y financiero en los próximos meses, no descartamos que la autoridad monetaria pueda volver a instrumentar alzas a fin de mantener la prudencia monetaria para minimizar los riesgos de estrés cambiario y/o en el mercado de la deuda en pesos.

•Brecha contenida por segunda semana. Luego de la volatilidad evidenciada durante enero, los dólares financieros mostraron una relativa calma en lo que va de febrero. En la semana, el CCL fue el dólar paralelo con mayor dinamismo, cerrando este viernes en torno a los $370 (+1,7%). El MEP, por su parte, disminuyó 0,8% en la semana a $354, mientras que el blue bajó 0,3% a $377. De esta forma, la brecha promedio con los tres dólares concluyó la semana en 92,7%, por debajo del 95% del viernes pasado y el 99% del último viernes de enero.

El BCRA volvió a acelerar la devaluación. En línea con la aceleración inflacionaria que se habría registrado durante enero y sostenido los primeros días de febrero, la autoridad monetaria convalidó un crawling peg cambiario del 5,9% de TEM, superando el 5,6% de la semana previa y el 5,1% promedio de enero. Esta sería una señal que confirmaría que, al menos por el momento, el Gobierno no busca aplicar la tradicional receta de años electorales de frenar el ritmo de suba del tipo de cambio oficial. El equipo económico es consciente que evitar una profundización del atraso cambiario es condición necesaria para reducir las chances de una mayor pérdida de competitividad externa, apoyar una reducción en la brecha cambiaria y promover una mejora en la acumulación de reservas. No obstante, como venimos señalando no prevemos que se busque desandar el atraso, sino administrarlo. En este sentido, el nivel de tipo de cambio real seguirá siendo funcional a un exceso de demanda de divisas en el mercado cambiario.

La presente es una síntesis del Monitor Cambiario, exclusivo para clientes Corporate.

Monitor Cambiario Semanal – Enero fue de más a menos en el “Frente de los Dólares”

El BCRA continúa vendiendo USD en el MULC

Luego de comprar casi USD 2.000 millones en diciembre gracias a la segunda edición del “dólar soja”, la dinámica de la intervención del BCRA en el MULC mostró un quiebre a mediados de enero: pasó de comprar USD 285 millones en las primeras 11 ruedas del año a vender USD 476 millones en las últimas 11 ruedas del mes. Como resultado, la autoridad monetaria cerró enero con un saldo negativo por USD 191 millones, levemente por encima de los USD 136 millones que vendió en enero del 2022. Cabe recordar que en los últimos 20 años tan sólo en 3 la autoridad monetaria arrancó con un saldo mensual vendedor en el MULC: 2014, 2015 y 2022.

De cara a un nuevo mes, los antecedentes muestran que el panorama cambiario en febrero suele ser más desafiante que en enero: en 15 de los últimos 20 años el saldo neto del BCRA en el MULC fue peor en febrero que en enero. Sumado a esto, los nuevos ingredientes que añade la coyuntura actual nos anticipan que a menos que se tomen nuevas medidas lo más probable es que la autoridad monetaria continúe desprendiéndose de divisas durante febrero. De hecho, en los primeros tres días del mes el BCRA ya lleva vendidos USD 147 millones, según fuentes del mercado. Consecuentemente, en la última semana el BCRA mostró un saldo vendedor en el MULC por USD 262 millones, levemente por encima de lo vendido en la semana previa (USD 212 millones).

La liquidación del Agro mostró su peor enero desde que se tiene registro

El adelanto en las ventas de soja en diciembre, la marcada caída en la cosecha de trigo y el incentivo del sector a retener a la espera de una nueva edición del “dólar soja” generaron una marcada caída en las liquidaciones del agro en el último mes: totalizaron apenas USD 938 millones, cuando en los últimos 10 años promediaron USD 1.780 millones y en 2022 fueron USD 2.442 millones. De esta manera, el primer mes de 2023 se sitúa como el peor enero desde 2006 a precios corrientes y como el peor enero desde que se tiene registro (2003) en caso de compararlo a precios constantes.

Con vistas a febrero, el panorama luce poco alentador, dado que la liquidación suele ser baja en el mes por cuestiones estacionales: en los últimos 12 años la liquidación del agro en febrero fue en promedio un 17% inferior a la de enero (sólo en 2014 -devaluación mediante- y 2022 superó los valores del mes previo). Hacia adelante, las lluvias que se evidenciaron en los últimos días y las pronosticadas para la próxima semana serán claves para ponerle un piso a las proyecciones de caída de los volúmenes de cosecha gruesa, la cual aparecería recién en el segundo trimestre.

Como corolario, 2023 comenzó con una marcada sangría de Reservas

Las Reservas Brutas mostraron una caída de USD 3.186 millones en enero, producto de las ventas netas en el MULC, los pagos de deuda pública en USD (tanto al FMI como a acreedores privados) y la recompra de bonos públicos en USD. A su vez, como resultado de esta dinámica, estimamos que las Reservas Netas según la métrica del programa con el Fondo mostrarían una caída cercana a los USD 3.000 millones desde fines de 2022 hasta la fecha. Esto último torna aún más desafiante el cumplimiento de la meta de Reservas para el primer trimestre (+USD 500 millones desde fines de 2022). Este panorama obligará a renovar constantemente los esfuerzos por obtener recursos por el lado de la cuenta financiera o acotar la demanda de divisas vía restricciones o desincentivos.

La brecha cambiaria se mantuvo estable la última semana

Luego de la volatilidad evidenciada en las semanas previas, los dólares financieros mostraron una relativa calma y una leve moderación en las últimas ruedas. El dólar blue mostró una brecha del 102% ($379) cuando la semana previa cerró en 107%. A su vez, la brecha entre la cotización oficial y el CCL pasó de 97% al 94% ($364), mientras que con el MEP pasó de 92% a 90% ($357).

No obstante, vale la pena aclarar que lo más probable es que la relativa calma financiera esté vinculada a la recompra de bonos en USD que está llevando adelante el Gobierno. De acuerdo con la información provista por la Tesorería General de la Nación, a fines de enero el Gobierno poseía un stock de USD 374 millones en bonos en dólares, lo que indica que ya utilizaron más de un tercio de los valores anunciados inicialmente. Si bien en algún momento pueden anunciar que el proceso de recompra superará los USD 1.000 millones, lo más probable es que FMI plantee sus críticas a esta operatoria en la próxima revisión.

La dinámica de las variables nominales mostró un quiebre a mediados de mes producto de las nuevas dudas sobre el sendero de desinflación

La moderación que mostró la inflación en noviembre y diciembre generó un cierto alivio en las expectativas sobre las variables nominales hasta mediados de mes. En esta línea, el crawling peg mostró una marcada desaceleración en los primeros días de enero (la TEM diaria promedio en los primeros días del mes se ubicaba por debajo del 5% cuando durante diciembre promedió un 6%) e incluso se comentó la posibilidad de reducir la tasa de política monetaria, posibilidad que posteriormente el BCRA descartó.

No obstante, la mayor volatilidad de los dólares financieros, el incremento en el precio de la hacienda en pie y los relevamientos privados de precios generaron nuevamente dudas sobre la posibilidad de reducir la inflación en el corto plazo. Consecuentemente, en línea con el resurgimiento de las mayores expectativas de inflación en el corto plazo, el crawling peg en la segunda mitad del mes se consolidó por encima del 5% (la TEM diaria promedió 5,25% entre el 17 y el 31 de enero). Como resultado, el tipo de cambio oficial se incrementó un 5,50% mensual punta a punta en enero.

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Monitor Cambiario Semanal – La novela de los pases

Claves de la Semana Cambiaria

En la última semana se acentuó la tendencia vendedora de la autoridad monetaria en el MULC. En las últimas cinco ruedas se desprendió de USD 211 M, cuando en la semana previa había vendido USD 145 M y durante la primera mitad del mes había comprado USD 281 M. De esta manera, enero acumula un saldo negativo por USD 76 M cuando aún faltan dos ruedas para el cierre de mes. Cabe recordar que en los últimos 20 años en tan sólo en 3 la autoridad monetaria arrancó con un saldo mensual vendedor en el MULC: 2014, 2015 y 2022. Como resultado de esta dinámica y de los pagos de deuda a acreedores privados y al mismo FMI, estimamos que las Reservas Netas según la métrica del programa con el Fondo mostrarían una caída cercana a los USD 2.000 M desde fines de 2022 hasta la fecha.

Se estancó la liquidación del agro desde mediados de mes. Buena parte de esta tendencia vendedora del BCRA se explica por la marcada caída en las liquidaciones del agro producto del adelanto en las ventas de soja en diciembre, la abrupta caída en la cosecha de trigo y el incentivo del sector a retener a la espera de una nueva edición del “dólar soja”: pasaron de promediar USD 185 M diarios en diciembre y USD 60 M en la primera mitad de enero a apenas USD 30 M desde el día 16 de dicho mes. Más allá de la evolución mensual, la liquidación muestra también una reducción en su comparación interanual: en lo que va de enero promedia apenas USD 45 millones diarios, menos de un 40% de los USD 116 millones que promedió durante enero del 2022. En caso de seguir así se situará como el peor enero desde 2006. Hacia adelante, las lluvias que se evidenciaron en los últimos días y las pronosticadas para la próxima semana serán claves para evitar mayores ajustes a la baja en las perspectivas de la cosecha gruesa, la cual aparecería recién en el segundo trimestre.

● El crawling peg se sostiene por encima del 5% m/m. El tipo de cambio de referencia avanzó un 1,2% en la última semana, cerrando en $185,6 y acumulando una devaluación del 4,8% en lo que va del mes. Pese a mostrar una leve moderación en las últimas ruedas (pasó de promediar una TEM del 5,3% en la semana pasada a una TEM de 5,2% en las últimas 5 ruedas), el crawling peg se consolida por encima del 5% m/m por segunda semana consecutiva y apunta a cerrar el mes con una devaluación punta a punta cercana al 5,5% m/m, en línea con las proyecciones de inflación para el mes.

● Con una tendencia al alza de los dólares alternativos, la brecha cambiaria ya roza el 100%. Pese a la intervención del BCRA en Globales (distintas fuentes del mercado estiman que ya se ubica en USD 300 M), los dólares financieros se devaluaron a una mayor velocidad que el tipo de cambio oficial. Mientras el TC de referencia subió 1,2% en la última semana, el dólar MEP se incrementó un 1,6% y el CCL un 3,7%. Como consecuencia, las brechas cambiarias se ubicaron en un 92% y un 96% respectivamente. No obstante, dado que el blue continuó con su tendencia alcista (aumentó un 3,2% semanal), su brecha con el dólar oficial cerró la semana en 108%, el nivel más alto desde fines de agosto.

● El Tesoro cierra enero con un financiamiento neto superior a los $200.000 M. En la licitación de hoy el Tesoro captó fondos por casi $223.000 M frente a vencimientos en torno a $107.000 M. De tal manera, mostró un rollover de 210%, obteniendo un financiamiento neto de casi $116.000 M. Cabe señalar que este resultado se logró pese a no haber convalidado mayores rendimientos (la TEA para la LEDE con vencimiento en mayo se ubicó en 112,5%, similar a la última licitación) y donde casi la totalidad de los fondos correspondieron a instrumentos a tasa fija. A falta de la segunda vuelta de la licitación, el Tesoro habría alcanzado en el primer mes de 2023 un rollover del 144%. Dado que enero es un mes en el cual la estacionalidad del gasto público juega a favor del fisco, lo más probable es que el financiamiento captado conforme un colchón para hacer frente a los vencimientos de los próximos meses.

La novela de los pases

El día lunes, el BCRA decidió incrementar la tasa de pases pasivos para los FCI: pasó del 75% al 95% de la tasa de pases pasivos (a 1 día) con los bancos. De esta manera, con una tasa de pases pasivos para los bancos que se sitúa en 72% TNA (aumentó 2 p.p. a mediados de la semana pasada), la tasa que rinden los pases para los FCI mostró un fuerte incremento de 14,4 p.p. al pasar de 54% TNA (71,5% TEA) a 68,4% TNA (98,1% TEA).

¿Qué buscaba el BCRA con esta medida? La decisión se enmarca en la actual estrategia de la autoridad monetaria para contener la suba de los dólares financieros y evitar así mayores presiones sobre los precios y sobre el mercado cambiario. Pero ¿cuáles son los canales de transmisión que operan detrás de esta estrategia? Por un lado, la suba de tasas apunta a achicar los excedentes de liquidez que eventualmente podrían volcarse al dólar. En paralelo, al reducir la liquidez se pretende encarecer el costo de los créditos para fomentar la liquidación de divisas y evitar presiones cambiarias adicionales producto de apalancamientos en pesos.

Sin embargo, las repercusiones negativas que esta decisión trajo aparejadas para el resto de las entidades financieras y la posibilidad de poner en riesgo las colocaciones de deuda del Tesoro motivaron a la autoridad monetaria a dar marcha atrás y negociar un aumento menor de la tasa.

Concretamente, la suba de rendimientos situó a la tasa de pases para los FCI por encima de las alternativas que les ofrecen los bancos (cuentas corrientes remuneradas y plazos fijos), perjudicando su intermediación financiera y rentabilidad. De hecho, se evidenció una marcada migración de los depósitos de los FCI en los bancos hacia operaciones de pases con el BCRA: pasaron de promediar menos de $750 M diarios hasta el 20 de enero a más de $367.000 M entre el 23 y el 26 del presente mes. Dado que los bancos vienen siendo uno de los principales aliados del Tesoro en las últimas licitaciones (como así también en el último canje), una reducción en su liquidez podría traducirse en una menor demanda para las próximas licitaciones o incluso en un desarme de títulos públicos en pesos, lo cual encarecería el financiamiento al deteriorar sus cotizaciones en el mercado secundario.

Frente a este escenario, el jueves las autoridades no sólo corrigieron a la baja el coeficiente de la tasa de pases para FCI de un 95% a un 85% de la correspondiente a pases pasivos de los bancos, sino que también habilitaron a estos últimos a realizar operaciones de caución bursátil con el fin de “mejorar el mecanismo de transmisión de la tasa de referencia establecida por el Directorio del BCRA a las tasas de corto plazo del sistema financiero”. Mediante esta medida adicional se busca continuar encareciendo el costo del dinero al incrementar la tasa de cauciones, que tendrá como piso el nivel de la tasa de pases a 1 día producto del arbitraje que realizarán los bancos.

Entonces, ¿qué nos dejan como lección los idas y vueltas de la última semana? Como ya hemos mencionado, mediante la suba de tasas el BCRA pretende mantener bien remuneradas las colocaciones de pesos a corto plazo para evitar mayores presiones sobre los dólares alternativos sin la necesidad de subir la tasa de política monetaria. Esto se debe a que una nueva suba de tasas de las LELIQ achicaría el spread con las tasas que ofrece el Tesoro con las LEDES, reduciendo así el financiamiento neto. En este contexto, podemos identificar el trade-off al que se enfrentan las autoridades del BCRA al momento de definir el nivel de la tasa de interés: contener la suba de los dólares alternativos (cos costos cuasifiscales asociados) o contribuir a sostener las colocaciones del Tesoro en el mercado local en un año en el cual las fuentes de financiamiento se encuentran sumamente acotadas.

La presente es una síntesis del Monitor Cambiario, exclusivo para clientes Corporate.

Monitor Cambiario Semanal – Volvieron las ventas del BCRA en el MULC

Claves de la semana cambiaria

• Fin a la racha de compras del BCRA en el MULC. Tras 19 ruedas de compras netas positivas, y sin ingresos “extra” como en la semana pasada (+USD 200 M de China), esta semana la autoridad monetaria tuvo que desprenderse de USD 143 M por sus operaciones en el mercado cambiario, acumulando a este viernes cuatro jornadas de (leves) rojos, los cuales no resultan mayores por la continuidad en la restricción a la demanda por importaciones. La última semana que había terminado en terreno negativo la del 25/11, previo al “dólar soja 2.0”. En el mes el BCRA logra acumular compras por USD 138 M (por encima de los USD 65 M del mismo lapso de 2022). De esta forma, la dinámica del mercado cambiario se va perfilando más en línea con lo esperado, afectada por la menor liquidación del agro (no sólo por motivos estacionales, puesto que caen 55% con relación a enero 2022) producto del adelanto en las ventas de soja en diciembre, la marcada caída en la cosecha de trigo y el incentivo del sector a retener a la espera de una nueva edición del “dólar soja”. Las lluvias que previstas para los próximos días serán claves para las perspectivas de la cosecha gruesa frente a la grave sequía actual.

• Recompra de deuda soberana en dólares. El miércoles el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció que comenzaría a recomprar instrumentos de deuda pública nacional denominados en moneda extranjera por un monto de hasta USD 1.000 M, concentrándose en los bonos cuyos vencimientos operan en 2029 y 2030 (GD29 y GD30, principalmente). El objetivo declarado es el de mejorar el perfil de vencimientos de la deuda pública, aunque la medida también apuntaría a ponerle un piso al precio de estos bonos, procurando, de esta forma, contribuir a mantener la brecha cambiaria en los rangos actuales, dando cuenta de la preocupación del Gobierno por los movimientos de los dólares libres. En este sentido, la decisión pareciera formalizar un mecanismo de intervención en estos mercados que se venía dando desde hace algunas semanas. Los interrogantes que persisten giran en torno a cómo se financiarán dichas compras frente a un frente de dólares y pesos que seguirá tensionado en los próximos meses.

• En el mismo sentido, el BCRA subió la tasa de los pases. El mismo día la autoridad monetaria resolvió incrementar en 2 p.p. la tasa para las operaciones de pases, modificando el esquema de tasas por primera vez desde septiembre. Así, la tasa de pases pasivos a 1 día hábil de plazo trepó al 72% TNA (105% TEA), reduciendo el spread con la tasa de política monetaria (75% TNA, 107% TEA) a los mínimos de la actual gestión.

•Volatilidad en los dólares libres termina con una segunda semana con brecha al alza, aunque contenida debajo del 100%. Aún en el marco del inicio de la recompra de deuda comentada más arriba, el CCL trepó 3% esta semana (cerró hoy en $353), mientras que el MEP subió 2,3% a $351. El blue, por su parte, terminó en $376 (+1,9% s/s). Así, la brecha con los tres dólares se situó en 96,4%, trepando desde el 90,4% promedio de diciembre.

• Licitación de deuda con resultado satisfactorio. Luego del canje de deuda de inicios de 2023, el equipo de Finanzas enfrentaba vencimientos por cerca de $350.000 millones y logró captar alrededor de $440.000 millones en las operaciones de esta semana (primera y segunda vuelta), captando un financiamiento neto de alrededor de $90.000 millones (rollover del 124%). La próxima prueba será el 27/1, cuando el Tesoro deba renovar vencimientos por algo más de $100.000 millones, monto que consideramos no va a presentar mayores inconvenientes un mes tranquilo para el déficit fiscal primario. Para febrero el desafío será similar a enero: vencimientos en la zona de $500.000 millones.

• El crawling peg se despegó levemente del 5% m/m. El ritmo de devaluación del tipo de cambio oficial promedió 5,3% de TEM esta semana, superando el 4,9% de la semana pasada. En lo que va del mes navega a un ritmo del 5,2%, desacelerándose respecto al 6% de diciembre y constituyendo el menor ritmo desde agosto de 2022.

La presente es una síntesis del Monitor Cambiario, exclusivo para clientes Corporate.

Monitor Cambiario Semanal – El BCRA logra sostener las reservas en el arranque de 2023

Claves de la semana cambiaria

• Ingresos puntuales del viernes le permitieron al BCRA la mayor compra del año. La adquisición neta de divisas de la autoridad monetaria en el mercado cambiario sumó USD 219 M en la semana, acumulando una racha de 18 ruedas positivas. El registro se encontró bien por encima de los USD 60 M de la semana pasada. La clave de esta marcada suba no respondió a la dinámica habitual del MULC (las compras del resto de los días se venían moderando), sino a que este viernes ingresaron cerca de USD 200 M en concepto de préstamos destinados a inversiones en infraestructura provenientes de China, como había ocurrido en la última semana de diciembre. En la primera quincena se sumaron USD 280 M, superando el registro de las mismas ruedas de 2022, cuando había alcanzado USD 204 M).

•  La moderación inflacionaria que confirmó diciembre (IPC +5,1% m/m) es una buena noticia para el frente cambiario. Como comentamos en el informe semanal pronto a publicarse, una de las claves para preservar la “estabilidad” reciente reside en evitar nuevos shocks sobre en la nominalidad. Si la inflación se acelerara nuevamente el actual esquema de política económica volvería a verse presionado: el Gobierno podría responder imprimiéndole una mayor velocidad al ritmo de devaluación, lo cual retroalimentaría la dinámica de precios y el escenario ganaría inestabilidad; pero, por otra parte, convalidar un mayor atraso cambiario dificultaría aún más la capacidad de defender la paridad oficial y pondría en jaque la necesidad de acumular reservas.

• El crawling peg se estaciona en el 5% m/m. En línea con la moderación en los registros de inflación, en la segunda semana del año el BCRA siguió convalidando el menor ritmo de suba del dólar oficial desde agosto pasado, cayendo 1 p.p. respecto al 6% de diciembre. Esta moderación es consistente con la intención del equipo económico de ir disminuyendo paulatinamente la dinámica de la nominalidad de la economía, reduciendo las presiones de costos de empresas que se encuentran dentro de los acuerdos de precios. Sin corrección mediante, en 2023 el Gobierno seguirá administrando un atraso cambiario acumulado que seguirá atentando en contra de la meta de acumulación de reservas.

• De la mano del blue, la brecha cambiaria subió, pero sigue por debajo del 100%. Tras una primera semana del año en calma, los dólares financieros volvieron a trepar por encima del oficial. Por su parte, la reducida oferta que estaría mostrando el blue sigue impulsando su cotización hacia arriba, marcando nuevos máximos en moneda corriente y manteniéndose como el más caro entre los tres. De esta forma, la brecha con los tres dólares se situó en 94,2%, superando el 89,7% del primer viernes de 2023.

• Sin cambios en la tasa de política. En línea con nuestras proyecciones, tras la publicación del IPC de diciembre (+5,1 m/m), el directorio del BCRA mantuvo inalterada la tasa de política monetaria en TNA 75% (TEA 107%) a fin de “contribuir a la desaceleración gradual de la inflación en el mediano plazo, consolidando la estabilidad financiera y cambiaria”. Entendemos que la decisión muestra la prudencia de la autoridad monetaria a fin de minimizar los riesgos de estrés cambiario y/o en el mercado de la deuda en pesos, aguardando una consolidación de la baja en el ritmo de inflación en el tiempo. De esta forma, diciembre fue el segundo mes consecutivo con tasa real mensual positiva (1,1%, ex-post).

• Expectativas de devaluación se moderan al ritmo del menor crawling. La decisión del BCRA de convalidar un menor ritmo de devaluación, junto con la menor percepción de un salto abrupto en el tipo de cambio oficial viene enfriando las expectativas de devaluación que se observan a través de las tasas implícitas de los contratos de dólar futuro.

La presente es una síntesis del Monitor Cambiario, exclusivo para clientes Corporate. Para más detalles sobre nuestro view de cara a 2023 sugerimos leer nuestro próximo informe semanal.

Monitor Cambiario Semanal – El BCRA logra extender sus compras

Claves de la semana cambiaria

• El BCRA extiende sus compras. A pesar de la finalización del “dólar soja 2.0”, la adquisición neta de divisas de la autoridad monetaria en el mercado cambiario sumó USD 60 M en la semana, destacándose el “atípico” resultado del jueves (+USD 56 M). ¿Podrá mantenerse esta tónica?

• El crawling peg profundizó su desaceleración en el arranque del año. En línea con la moderación en los registros de inflación (el IPC habría cerrado diciembre en la zona del 5%), en la primera semana del año se profundizó la desaceleración en la suba del dólar oficial, cayendo a un ritmo no visto desde agosto.

• La brecha cambiaria se mantiene estable en niveles elevados. Los dólares financieros mantuvieron una tendencia estable-bajista, mientras que el blue volvió a mostrar una dinámica más volátil, manteniéndose como el más caro entre los tres.

• En noviembre se relajaron los pagos pendientes a importadores. Según nuestras estimaciones, la postergación de pagos acumulada hasta noviembre resultó similar al stock de reservas con las que el BCRA concluyó 2022, permitiendo al mismo tiempo evitar un mayor deterioro de estas últimas y de la actividad productiva (ver informe semanal). No obstante, la brecha entre las importaciones pagadas (MULC) y las devengadas (ICA) se redujo en noviembre, dando cuenta de cierta reducción del stock adeudado.

• El resultado del canje de deuda del Tesoro dejó una buena impresión. En su primera operación del año, el equipo económico logró descomprimir vencimientos por cerca de $3bn correspondientes al 1T del año, evidenciándose una mayor participación privada que la vista en el canje de noviembre. De cara a los próximos meses, estimamos que el nuevo perfil de vencimientos mensuales hasta marzo es una cifra manejable, aunque la historia cambia a partir de abril. Más detalles, en este informe.

• Frente al dato de inflación de diciembre, ¿bajará la tasa del BCRA? El próximo jueves 12/1 INDEC dará a conocer la evolución del IPC de diciembre. Dado que se espera que el último mes del año pasado haya renovado las señales sobre una moderación en la nominalidad, la autoridad monetaria podría verse tentada a instrumentar un recorte en la tasa de política. ¿Qué esperamos?

Tras el “dólar soja 2.0.”, el BCRA logró seguir siendo comprador

El BCRA extiende su racha. A pesar de la finalización de la segunda edición del Programa de Incremento Exportador (PIE II o “dólar soja 2.0”), la adquisición neta de divisas de la autoridad monetaria en el mercado cambiario sumó USD 61 M, destacándose el “atípico” resultado del jueves (+USD 56 M). Si bien se observa una clara moderación en relación a diciembre, cuando, PIE II mediante, la compra promedio semanal ascendía a USD 400 M, el resultado de esta semana fue superior a lo visto en octubre y noviembre (sin “dólar soja”).

¿Podrá mantenerse esta tónica? Frente al “desierto cambiario” que se aproxima, difícilmente: 1) a diferencia de los últimos dos años los precios internacionales no compensarán los menores volúmenes esperados para la cosecha producto de las inclemencias climáticas, las cuales alargaron asimismo el puente hasta la próxima cosecha gruesa; 2) el “dólar soja 2.0” deja menos producto para vender en 2023 y genera incentivos a retener hacia adelante ante la expectativa de que se vuelvan a repetir los beneficios concedidos; 3) la brecha cambiaria persistirá en niveles incompatibles con un escenario de estabilidad económica y el nivel de tipo de cambio real seguirá atentando en contra; 4) el financiamiento neto del FMI será negativo, cuando desde 2018 viene siendo positivo, tornando aún más desafiante la meta de acumulación de reservas. En este contexto, será clave la puesta en marcha del Gasoducto NK para reducir las importaciones energéticas previo a la temporada invernal.

Este panorama obligará a renovar constantemente los esfuerzos por obtener recursos por el lado de la cuenta financiera o acotar la demanda de divisas vía restricciones o desincentivos. Cabe recordar que en el primer trimestre deben acumularse USD 500 M en las reservas para cumplir con lo acordado con el FMI.

Por lo pronto, la semana que viene hay vencimientos de deuda por más de USD 2.300 M, de los cuales USD 1.000 M corresponden a pagos de interés por títulos públicos -repartidos entre el sector privado y el sector público-, de forma tal que afectarán la acumulación de reservas netas según el criterio del FMI. En sentido contrario, los USD 1.300 M restantes corresponden a pagos al Fondo (el primero de los tres del mes), utilizando parte de los DEG obtenidos como desembolsos en diciembre.

El crawling peg se desaceleró nuevamente

El incremento del tipo de cambio oficial promedió el menor ritmo en cuatro meses. El dólar oficial (Mayorista) finalizó la semana en $179,2 (+1,2% s/s), evidenciando un ritmo del 5% de TEM, por debajo del 5,9% de la última semana de 2022 y la menor velocidad desde agosto pasado.

Creemos que esta moderación se encuentra en línea con la intención del equipo económico de ir disminuyendo paulatinamente la dinámica de la nominalidad de la economía, reduciendo las presiones de costos de empresas que se encuentran dentro de los acuerdos de precios. Sin corrección mediante, en 2023 el Gobierno seguirá administrando un atraso cambiario acumulado que seguirá jugando en contra de la meta de acumulación de reservas.

Brecha estable

Calma en los financieros, mayor suba en el blue. El CCL (GD30) cerró este viernes en torno a los ARS 341, prácticamente sin cambios respecto al viernes pasado (+0,4%), mientras que el MEP (AL30) rozó los ARS 331, cayendo 1,4% en la semana. En contraste, el blue -que cerró en ARS 354- subió nuevamente por encima del dólar oficial (+2,3%). De esta forma, la brecha con los tres dólares se situó en 89,7%, debajo del 91,1% del último viernes de 2022.

Se modera la deuda con importadores

En noviembre se relajaron los pagos pendientes a importadores. En el marco del mayor control sobre las compras externas, se ha venido registrando un creciente stock de deuda comercial por importaciones. Según nuestras estimaciones, la postergación de pagos acumulada hasta noviembre rozó los USD 7.200 M, cifra similar al stock de reservas con las que el BCRA concluyó 2022. No obstante, la brecha entre las importaciones pagadas (MULC) y las devengadas (ICA) se redujo en noviembre: luego de promediar USD 1.200 M mensuales entre junio y octubre, estimamos que en el anteúltimo mes del año pasado dicha cifra se tornó negativa en cerca de USD 200 M, dando cuenta de cierta reducción del stock adeudado.

Por último, cabe señalar que no sólo despegó la deuda externa privada comercial, sino también la asociada a pasivos que las filiales locales reciben de su casa matriz: a septiembre (último dato disponible) mostraba un crecimiento próximo a USD 8.000 M en el año.

Se desacelera la inflación, ¿se reduce la tasa?

El próximo jueves 12/1 se dará a conocer la evolución del IPC Nacional de diciembre. Dado que se espera que el último mes del año se haya confirmado la una moderación en la nominalidad, la autoridad monetaria podría verse tentada a instrumentar un recorte en la tasa de política monetaria. Frente al equilibrio inestable en el que se seguirá moviendo la economía ante a los enormes desafíos provenientes del frente “de los dólares” y “los pesos”, creemos que sería prudente la decisión de mantener inalterada la tasa a fin de mostrar firmeza en los objetivos de anclar las expectativas de inflación, mantener a raya la brecha cambiaria y contribuir a sostener la demanda de pesos. Esta es una de las claves para minimizar los riesgos de estrés cambiario y/o en el mercado de la deuda en pesos, al menos hasta tanto la reducción del ritmo de inflación se consolide y extienda en el tiempo.

 

La presente es una síntesis del Monitor Cambiario, exclusivo para clientes Corporate.

 

Monitor Cambiario Semanal – Gracias “dólar soja”, bienvenido 2023

Claves de la semana cambiaria

• Las ventas por “dólar soja 2.0.” se aceleraron y permitieron cumplir con la meta de reservas. La liquidación extraordinaria del agro no se estuvo utilizando para flexibilizar el control de cambios, sino más bien para acumular las divisas necesarias para cumplir el objetivo de acumulación de reservas acordado con el FMI. El ingreso de divisas provenientes de China para completar el financiamiento de las represas de Santa Cruz -así como lo fue el giro del BID- constituyó un impulso adicional para alcanzar el objetivo de acumular USD 5.000 M pactado con el FMI. Las compras del mes fueron claves para generar un colchón de cara al “desierto cambiario” de los primeros meses de 2023.

• Dólar blue recalentado y financieros contenidos. El blue volvió a dispararse, trepando por encima del dólar oficial por segunda semana consecutiva (brecha roza el 100%), exponiendo en diciembre la mayor suba mensual desde julio. Por su parte, los dólares financieros exhiben subas menores (brechas en torno al 90%). Fuentes del mercado destacaron que se han detectado intervenciones oficiales en MEP y CCL para contener una mayor escalada. Con todo, la brecha promedio con los tres dólares se mantuvo relativamente estable en el mes, mientras que en 2022 los dólares se movieron por debajo de la inflación.

• El crawling peg cierra el año en la zona del 6%. En línea con la moderación en los registros de inflación (el IPC cerraría el mes en la zona del 5%), desde mediados de diciembre se observa una desaceleración en la suba del dólar oficial, el cual había promediado un ritmo del 6,7% de TEM entre noviembre y los primeros días de diciembre. Sin corrección mediante, en 2023 el Gobierno deberá administrar un retraso cambiario acumulado que atenta contra la necesidad de acumular reservas y mantener anestesiadas las expectativas de devaluación.

 • El Tesoro despide el año con otro resultado favorable con vistas a un arranque de 2023 desafiante. En la última licitación de 2022 (primera y segunda vuelta) logró capturar $344.000 M, obteniendo financiamiento extra por $282.000 M (rollover de 550%), erigiendo a diciembre como el mejor mes desde octubre 2020 (rollover del 247%). De esta forma, el mix anual de financiamiento del Tesoro entre emisión monetaria y deuda se dio vuelta en 2022 en favor de esta última fuente. De cara a los elevados vencimientos del 1T 2023 (+$4 bn), el Gobierno lanzó un canje voluntario a ejecutarse la semana entrante a fin de estirar maturities y despejar incertidumbre de corto plazo.

Ventas por “dólar soja 2.0.” se aceleraron y se cumplió la meta de reservas

Las liquidaciones marcaron la segunda mejor semana del mes. Las ventas de exportadores bajo la segunda edición del Programa de Incremento Exportador (PIE II, también conocido como “dólar soja”) treparon esta semana a casi USD 762 M, superando en un 35% al monto de la semana pasada. De esta forma, las liquidaciones acumuladas en las 23 ruedas de vigencia del “dólar soja 2.0” rozaron los USD 3.200 M.

Si bien el resultado representó 59% menos que el que arrojó el PIE I (USD 7.700 M), este guarismo estuvo en línea con lo esperado: los USD 3.000 M comprometidos por el sector (CIARA-CEC) representaban ventas 61% menores a las que ocurrieron en septiembre. ¿Por qué? Fundamentalmente debido a que en septiembre se registraba una importante demora en la comercialización de la cosecha de soja respecto a la media histórica, mientras que a finales de noviembre se había retornado a los niveles promedio y quedaba mucha menos oleaginosa por vender por parte de los productores.

En este marco, las liquidaciones de divisas del complejo oleaginoso-cerealero informadas por CIARA-CEC fueron récord en 2022: habiendo totalizado USD 3.700 M en diciembre (+40% i.a.) en todo el año superaron los USD 40.000 M, 20% por sobre 2021.

A costa de un nuevo deterioro en su patrimonio, el régimen de ventas del complejo sojero –junto al ingreso de divisas para inversiones en infraestructura- le permitió al BCRA cerrar el segundo mejor mes de compras del año. En la semana la autoridad monetaria adquirió USD 1.100 M, el mayor monto semanal del mes, totalizando casi USD 2.000 M en diciembre y algo más de USD 2.300 M contando los últimos días de noviembre, cuando comenzó el “dólar soja 2.0”.

¿Cómo cerró 2022? Con compras netas por poco más de USD 5.800 M, 15% más que en 2021 y el mejor resultado desde 2012. Desde Economía se informó que el cierre del año muestra un sobrecumplimiento de las metas de acumulación de reservas superior a los USD 440 M.

Escalada del blue y contención de los financieros

El blue volvió a mostrar un exceso de demanda, aunque moderando su suba sobre finales de la semana. Tras rozar los $357 el miércoles, el dólar informal cerró este viernes en $346, trepando 1,8% frente al viernes pasado y acumulando en diciembre una suba del 10,2%, la mayor desde julio (+24%).

¿Qué factores pueden haber motivando este movimiento? En primer término cabe señalar que esta cotización venía mostrando un manifiesto rezago en relación a la inflación acumulada en el año y a los fundamentos monetarios (“pesos en la economía”). A precios de hoy, el pico del overshooting del blue en julio pasado superaría los $450. En segundo término, 15 días atrás se abrió la posibilidad de que los pagos turistas extranjeros sean canalizados a través del dólar MEP – lo que implica una mejor cotización para ellos – a través de las tarjetas de crédito. Si bien esta medida tiende a quitarle presión a este mercado, generando una mayor oferta y evitando una disparada de la brecha, reduce la oferta del turismo receptivo en las “cuevas”. Finalmente, el cobro de aguinaldos/bonos de fin de año de cara al turismo emisivo puede haber influido en el arbitraje frente al llamado “dólar Qatar” (hoy en casi $370), incrementando la demanda.

¿Y los financieros? El CCL (GD30) cerró este viernes en torno a los $333, 0,6% por sobre el valor del viernes pasado, mientras que el MEP (AL30) se situó en $336, trepando 1,9%. Fuentes del mercado destacaron que se han detectado intervenciones oficiales en MEP y CCL para contener una mayor escalada.

¿Cómo quedó la brecha? La brecha cambiaria promedio con los tres dólares libres se mantuvo estable en la semana (pasó del 90,8% al 91,1%), manteniéndose por debajo del 100%.

¿Y en el año? Durante 2022 los dólares libres se movieron por debajo de la inflación (proyectada en la zona del 95% i.a) y del tipo de cambio oficial (+70% i.a.): el blue trepó 63% i.a. en diciembre; el CCL subió 61% y el MEP lo hizo 65%. Como resultado, la brecha promedio bajó del 98% al 90%.

El crawling peg se desaceleró en diciembre

El incremento del tipo de cambio oficial promedió una suba del 6% de TEM en el último mes del año, moderándose respecto al 6,6% de noviembre. El dólar oficial (Mayorista) finalizó la semana en $ 177,1, promediando un ritmo del 5,9% de TEM, acelerándose respecto al 5,3% de la semana pasada, dando cuenta de un freno en la tendencia bajista que mostraba desde la segunda semana de diciembre. De esta forma, el dólar oficial siguió moviéndose por encima de una inflación que estaría próxima al 5%.

En 2022 el tipo de cambio real volvió a apreciarse. ¿Se repetirá este atraso en 2023?  En diciembre el tipo de cambio trepó 70% i.a., bien por detrás de una inflación que proyectamos en la zona del 95% i.a., dando lugar a un tipo de cambio real multilateral que se apreció 10% en el año (20% por debajo del promedio histórico), aunque encontrando un piso a mediados de octubre.

¿Hacia adelante? En virtud de la necesidad de recuperar competitividad externa, apoyar una reducción en la brecha cambiaria y la acumulación de reservas, esperamos que el Gobierno siga buscando mover el tipo de cambio oficial a un ritmo más en línea con el de la inflación y por debajo del nivel de la tasa. Es decir que no prevemos que se busque desandar el atraso, sino administrarlo. En este sentido, el nivel de tipo de cambio real seguirá siendo funcional al exceso de demanda de divisas en el mercado cambiario.

La presente es una síntesis del Monitor Cambiario, exclusivo para clientes Corporate.

Monitor Cambiario Semanal – El crawling peg siguió desacelerándose

Claves de la semana cambiaria

• Tras dos semanas de moderación, rebotaron las ventas por “dólar soja 2.0.”, aunque esto no condujo a mayores compras netas por parte del BCRA. Aún con un día martes de escasas operaciones debido al feriado, las liquidaciones del complejo sojero crecieron 20% respecto a la semana pasada. No obstante, el BCRA logró hacerse apenas del 30% del total. Con todo, CIARA-CEC afirmó que se cumplió con la meta de ingreso de divisas del complejo cerealero-oleaginoso acordada con el Gobierno.

• Aprobación de las metas del 3T. El Board del FMI aprobó este jueves la tercera revisión del acuerdo de Facilidades Extendidas (EFF), activando automáticamente un desembolso de USD 6.000 M que compensa los pagos realizados esta semana y deja un excedente para la primera parte de 2023. La (desafiante) meta de acumulación de reservas de 2023 (USD 4.800 M) no fue modificada. Además de señalar que las tasas de interés reales positivas seguirán siendo esenciales, el organismo otorgó un waiver asociado a la introducción de prácticas de tipos de cambio múltiples y nuevas restricciones cambiarias, solicitando que sean removidas cuando las condiciones lo permitan.

• El crawling peg se desacelera con fuerza en las últimas dos semanas. Habiendo promediado un ritmo promedio de 6,7% de TEM entre noviembre y los primeros días de diciembre, esta semana el ritmo de devaluación del dólar oficial no sólo volvió a navegar por debajo del 6%, sino que estuvo más cerca del 5%.

• El blue se disparó y se convirtió en la cotización más cara, mientras persiste cierta calma en el CCL. Frente a la “pax” que sigue mostrando el CCL (algo menos el MEP), el blue trepó por tercera semana al hilo y sube bien por encima del oficial en lo que va de diciembre. No obstante, la brecha sigue moviéndose en torno al 90%.

• Las menores expectativas de devaluación de las últimas semanas le permitieron al BCRA seguir reduciendo su exposición al dólar futuro. En noviembre, su posición vendida registró apenas USD 705 M, lejos del pico de USD 7.100 M de julio y el menor valor desde agosto 2021.

Repuntaron las liquidaciones por “dólar soja 2.0.” y CIARA-CEC cumplió

Tras dos semanas de moderación en las ventas, las liquidaciones marcaron la segunda mejor semana del mes. Aún a pesar de la menor actividad del día martes, la liquidación de exportadores bajo la segunda edición del Programa de Incremento Exportador (PIE II, también conocido como “dólar soja”) trepó esta semana a casi USD 570 M (promedio diario de USD 114 M), superando en más de un 20% al monto de la semana pasada. De esta forma, a falta de 5 días hábiles de operaciones las liquidaciones acumuladas en las 13 ruedas desde el inicio del “dólar soja 2.0” rozan los USD 2.400 M. 

Meta cumplida. Hacia finales de este viernes, CIARA-CEC informó que desde la puesta en marcha del “dólar soja 2.0” el ingreso de divisas del complejo cerealero-oleaginoso alcanzó los USD 3.654 M. Es decir que los ingresos por soja representaron el 65% de este valor. De esta forma, la institución señaló que “se ha superado la meta de los 3 mil millones de dólares de ingresos del complejo cerealero oleaginoso”.

Volviendo al “dólar soja”, cabe señalar que si bien las liquidaciones son 60% menores a las del mismo periodo de la primera edición (USD 7.000 M), el guarismo se encuentra dentro de lo esperado: por sí mismos los USD 3.000 M comprometidos por el sector (CIARA-CEC) para todo el complejo cerealero-oleaginoso representan ventas 63% menores a las que ocurrieron en septiembre (USD 8.100 M). ¿Por qué? Esencialmente debido a que en septiembre se registraba una importante demora en la venta de la cosecha de soja respecto al promedio histórico, mientras que actualmente se retornó a los niveles promedio y queda menos soja por comercializar por parte de los productores.

Ahora bien, el régimen de ventas del complejo sojero no condujo a mayores compras netas por parte del BCRA. En la semana la autoridad monetaria adquirió USD 177 M (USD 900 M en el mes), la mitad de los USD 362 M adquiridos la semana pasada. Vale decir, captó una parte significativamente menor de lo liquidado por el PIE II: sólo el 31% vs el 77% de la última semana. ¿Por qué? La dinámica permite entrever que se realizaron mayores ventas (netas) al resto de la demanda (“otra demanda privada”), que pasaron de poco más de USD 110 M la semana pasada a casi USD 400 M esta semana. Desde el inicio del dólar “soja 2.0” el BCRA adquirió 51% del total liquidado, bien por debajo del 65% de la primera edición.

El BCRA convalida una fuerte desaceleración del crawling peg

Habiendo promediado un ritmo promedio de 6,7% de TEM entre noviembre y los primeros días de diciembre, el crawling no sólo perforó el 6% esta semana, sino que se acercó al 5%. El dólar oficial (Mayorista) finalizó la semana en ARS 174,8, promediando un ritmo del 5,3% de TEM, menor al 5,8% de la semana pasada. De esta forma, retoma el ritmo de agosto, pero frente a una inflación que se proyecta cerca de 1,5 pp menor a la que había arrojado dicho mes.

En ese sentido, a diferencia de lo que ocurrió hasta agosto, seguimos previendo que en el corto plazo el tipo de cambio oficial continúe moviéndose a un ritmo similar al del incremento de los precios y por debajo del nivel de la tasa, evitando una mayor apreciación cambiaria. Es decir que no prevemos que el Gobierno busque corregir el atraso, sino administrarlo. En este sentido, el nivel de tipo de cambio real seguirá siendo favorable al exceso de demanda de divisas al que se seguirá enfrentando la política económica en los próximos meses.

Despegue del blue, calma en los financieros

Mientras que los dólares financieros transitan un diciembre de relativa “pax”, el blue se aceleró con fuerza. El CCL (GD30) cerró este viernes en torno a los ARS 331, prácticamente sin cambios respecto al viernes pasado, mientras que el MEP (AL30) rozó los ARS 330, mostrándose más demandado (+2% s/s). En claro contraste, el blue -que cerró en ARS 340- registró una escalada significativa, trepando 5,9% (+$19) y acumulando tres semanas al alza (8,3% en lo que va de diciembre).

Aun así, no debe perderse de vista que en moneda constante el dólar informal arrastra un claro rezago: a precios de hoy el blue de los picos de julio pasado sería de ARS 460, mientras que, en la misma comparación, el de enero era un blue de ARS 380. De esta forma, la brecha cambiaria promedio con los tres dólares libres trepó levemente del 89% al 91% (se mantiene entre el 90% y el 100% desde octubre), aunque con el blue saltó de 87% al 94%.

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Monitor Cambiario Semanal – Algunas noticias favorables

Claves de la semana cambiaria

• Aflojan las liquidaciones por “dólar soja 2.0.” Las liquidaciones del complejo sojero sumaron USD 470 M. El promedio de ventas diarias se redujo por segunda semana. Ya se vendió 61% de lo acordado con CIARA-CEC. A fuerza de un recorte en la demanda del resto de la economía, el BCRA logró hacerse del 77% de ese total (USD 361 M), bien por encima del promedio hasta el momento e incluso de la media de septiembre. ¿Se llegará a cumplir con el piso de liquidaciones de USD 3.000 M?

• Sin cambios en la tasa pese a desaceleración de la inflación. Tras conocerse la marcada (y sorpresiva) desaceleración en la inflación que enseñó noviembre -dando lugar a una tasa real positiva luego de 11 meses- el Directorio del BCRA resolvió mantener inalterada la tasa de política monetaria a fin de contribuir a “consolidar la estabilidad financiera y cambiaria y a reforzar la tendencia de gradual desaceleración de la inflación en el mediano plazo”. Frente al equilibrio inestable en el que se mueve la economía actualmente, y visualizando los enormes desafíos que enfrentará la política económica en los próximos meses, creemos acertada y prudente la decisión a fin de mostrar firmeza en los objetivos de anclar las expectativas de inflación, mantener a raya la brecha cambiaria y contribuir a sostener la demanda de pesos.

• Si bien mantuvo las tasas, el BCRA convalidó un menor crawling peg, en línea con la desaceleración de la inflación. Habiendo promediado un ritmo promedio de 6,7% de TEM entre noviembre y los primeros días de diciembre, el ritmo de devaluación del dólar oficial perforó el 6% esta semana por primera vez desde finales de septiembre.

• Una exitosa licitación que contribuye a la calma en el frente financiero. En la primera y más relevante licitación de deuda de diciembre -que concentraba el 90% de los vencimientos del mes- el Tesoro logró calmar la incertidumbre instaurada en los últimos meses de la mano de un monto significativo de financiamiento neto, superando ampliamente las expectativas tras 5 licitaciones con magros resultados. ¿Cuáles fueron las claves?

• Calma en los dólares libres. El CCL y el MEP cayeron en la semana, posibilitando que la brecha vuelva a la zona del 90%. El blue volvió a mostrar un alza en línea con la del dólar oficial.

• Las expectativas de devaluación siguieron enfriándose esta semana. La curva de dólar futuro se siguió contrayendo, mientras que la demanda por bonos atados al dólar oficial se redujo, dando cuenta de un mercado que sigue postergando las chances de ver un salto del tipo de cambio en forma discreta.

Aflojan las liquidaciones por “dólar soja 2.0.”

Segunda semana de moderación en las ventas. La liquidación de exportadores bajo la segunda edición del Programa de Incremento Exportador (PIE II, también conocido como “dólar soja”) se redujo esta semana a un promedio diario de USD 94 M, principalmente por las reducidas ventas de las primeras 3 jornadas (USD 61 M/d). El promedio resultó ser casi 30% inferior al de la semana pasada y 50% menor al de la primera.

De esta forma, a falta de 10 días hábiles de operaciones las liquidaciones acumuladas en las 13 ruedas desde el inicio del “dólar soja 2.0” suman USD 1.824 M, 61% del piso comprometido por el complejo sojero. Por otro lado, el guarismo representa 65% menos que en el mismo periodo de la primera edición del “dólar soja” (USD 5.010 M). Sin embargo, cabe señalar que este guarismo se encuentra dentro de lo esperado: por sí mismos los USD 3.000 M comprometidos por el sector (CIARA-CEC) representarían ventas 60% menores a las que ocurrieron en septiembre. En este punto es importante recordar que en septiembre se registraba una importante demora en la comercialización de la soja respecto al promedio histórico, mientras que actualmente se retornó a los niveles promedio y queda menos soja por comercializar por parte de los productores.

¿Se llegarán a liquidar los USD 3.000 M comprometidos por el sector? Para tener una dimensión del desafío, si el ritmo diario de esta semana se mantuviera en lo que resta del mes, las liquidaciones totalizarían casi USD 2.800 M, por lo que no se cumpliría con lo acordado. Para cumplir el promedio diario debería al menos ir a la zona de los USD 120 M.

El régimen de ventas del complejo sojero redundó en menores compras netas por parte del BCRA.  En la semana la autoridad monetaria adquirió USD 360 M, a razón de USD 72 M promedio por día, contra los USD 79 de la semana pasada y los USD 91 M de la primera semana de vigencia del renovado esquema. No obstante, esta semana logró captar el 77% de lo liquidado por el PIE II, bien por encima del 50% que venía registrándose hasta el momento y superando el promedio del PIE I (65%).

Estas dinámicas permiten entrever que las ventas al resto de la demanda (“otra demanda privada”) también mermaron esta semana (-60%), tal como se ve en el gráfico.

La brecha con el CCL volvió a acercarse al 90%

Tras una semana de mayor volatilidad, los dólares financieros volvieron a mostrarse calmos. El CCL (GD30) cerró este viernes en torno a los ARS 331 (-2% vs el miércoles de la semana pasada), mientras que el MEP (AL30) rozó los ARS 323 (-1,7%). Por su parte, el blue -que cerró en ARS 321- volvió a enseñar una suba más parecida a la del tipo de cambio oficial, trepando 1,6% en relación con el miércoles de la semana pasada. De esta forma, la brecha cambiaria promedio con los tres dólares libres logró perforar el 90%: pasó de 93% la semana pasada a 88% este viernes, mientras que la del CCL cayó al 92%.

Una licitación inesperadamente exitosa de cara a finde año

El Tesoro logró calmar la incertidumbre instaurada en los últimos meses de la mano de un monto significativo de financiamiento neto en su última licitación. Frente a vencimientos superiores a $410.000 M, las autoridades colocaron deuda por encima de $830.000 M en la última licitación, alcanzando un financiamiento neto de casi $420.000 M. De tal forma, las colocaciones de deuda duplicaron los vencimientos en la primera mitad del mes, logrando un rollover del 200%, cuando en el último bimestre fue de apenas el 106%.

Ahora bien, como contrapartida del fondeo captado, el Tesoro se vio obligado a: 1) convalidar mayores rendimientos (TEA del 117% en la LEDE a marzo), 2) continuar endeudándose a un plazo muy acotado (promedio de 4 meses excluyendo bonos a 2027 que integran encajes); 3) recurrir nuevamente a instrumentos ajustables por CER (explicaron el 19% de lo adjudicado); 4) presionar a actores institucionales (provincias, municipios, etc.) para que incrementen su participación en las licitaciones; y 5) apelar a mayor liquidez bancaria.

Dado que más del 90% de los vencimientos del mes se encontraban concentrados entre el día 15 y el 16, estimamos que en la próxima licitación (28/12) el Tesoro ampliará el financiamiento neto obtenido con los fines de cerrar 2022 sin recurrir a los Adelantos Transitorios. Sin embargo, no descartamos que se utilicen fuentes de financiamiento alternativas para cerrar el programa financiero del año en caso de ser necesario. Esto último fue convalidado el 6/12, cuando el Tesoro le vendió USD al BCRA por $200.000 M (USD 1.180 M, que parte corresponden al remanente de DEG) para cubrir parte de sus necesidades fiscales.

En línea con la desaceleración en la inflación, se modera el crawling peg

Habiendo promediado un ritmo promedio de 6,7% de TEM entre noviembre y los primeros días de diciembre, el crawling perforó el 6% esta semana. El dólar oficial (Mayorista) finalizó la semana en ARS 172,7, promediando un ritmo del 5,8% de TEM, bien por debajo del 6,6% de la semana pasada. De esta forma, deja atrás los máximos niveles del gobierno de Alberto Fernández. Con una inflación que perforaría el 5,5% en diciembre, el tipo de cambio se seguiría moviendo por encima del incremento de los precios, evitando una mayor apreciación cambiaria. Este pareciera ser el objetivo del Gobierno, más que el de corregir el atraso. En este sentido, el nivel de tipo de cambio real seguirá contribuyendo al exceso de demanda de divisas.

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Monitor Cambiario Semanal – ¿Tensiones por el manejo de tasas y tipo de cambio?

Claves de la semana cambiaria

  • “Dólar soja 2.0” permite continuar con acumulación de reservas. En las tres ruedas de esta semana las liquidaciones del complejo sojero fueron de casi USD 400 M, de los cuales la autoridad monetaria logró hacerse de USD 240 M (60% del total). El promedio de ventas diarias se redujo vs la semana pasada. Ya se vendió 45% de lo acordado con CIARA-CEC. En línea con lo esperado, las ventas vienen siendo 43% inferiores a las de septiembre. Si en las 15 ruedas restantes el ritmo de ventas se mantuviera igual que el de esta semana las liquidaciones totalizarían USD 3.400 M.
  • Tras dos semanas de calma, rebotaron los dólares financieros. El CCL y el MEP treparon por encima del 3% en la semana, mientras que el blue mostró una mayor parsimonia, moviéndose más en línea con el tipo de cambio oficial. Con todo, la brecha promedio con estos tres dólares continúa por debajo del 100% y el CCL en términos reales es casi 25% más bajo que en los picos de julio.
  • ¿Tensiones entre BCRA y Economía por el manejo de tasas y tipo de cambio? Mientras el crawling peg no afloja y el BCRA viene de mantener inalterada la tasa de política por segundo mes consecutivo, comenzaron a correr rumores sobre una potencial moderación en la velocidad del ritmo de la devaluación y un recorte en las tasas si la inflación -como busca el Gobierno- comienza a disminuir en los primeros meses de 2023. En el actual equilibrio inestable en el que se encuentra la economía creemos que constituye una señal que no colabora en brindar mayor certidumbre y claridad sobre una firme convicción por seguir el curso del acuerdo con el FMI.
  • Menores expectativas de devaluación en el mercado. La curva de dólar futuro se sigue contrayendo, lo cual demuestra que el mercado sigue postergando las chances de ver un salto del tipo de cambio en forma discreta. Se achicó la brecha entre lo que espera el mercado y el actual ritmo cambiario.
  • La semana que viene, otra importante licitación para el Tesoro. Noviembre finalizó con el peor financiamiento neto negativo desde abril y constituye una señal preocupante de cara a lo que viene. El jueves 14/12 vencen más de $400.000 M. El Gobierno no deberá únicamente lograr un roll-over del 100%, sino que necesita conseguir financiamiento neto fresco para evitar recurrir a fuentes alternativas que vuelquen más pesos a la economía en un mes con déficit elevado.

La brecha con el CCL volvió a acercarse al 100%

Tras dos semanas en calma, los dólares financieros volvieron a mostrarse demandados. El CCL (GD30) cerró este miércoles en torno a los ARS 338 (+3,1% vs el viernes), mientras que el MEP (AL30) rozó los ARS 329 (+3,3%). Por su parte, el blue -que cerró en ARS 316- mostró una suba más parecida a la del tipo de cambio oficial, subiendo 1,3% en relación con el viernes pasado. De esta forma, la brecha cambiaria promedio con los tres dólares libres trepó al 93% desde el 90% del viernes pasado, mientras que la del CCL rozó el 100%.

El crawling peg se mantiene en torno al 6,6%

Pese a amagar con irse a la zona del 7%, esta semana el ritmo de devaluación mantuvo la tónica de noviembre. Finalizó la semana en ARS 169,9, promediando un ritmo del 6,6% de TEM, manteniéndose en los máximos niveles del gobierno de Alberto Fernández.

En la semana corrieron rumores sobre una posible intensión del Gobierno de aminorar la velocidad del crawling los próximos meses frente a la expectativa de que la inflación converja hacia registros más bajos. Creemos que aún es temprano para comenzar a ofrecer esa clase de señales, máxime cuando el tipo de cambio real viene de acumular una caída superior al 20% desde inicios de 2021, no resulta consistente con un superávit sostenido en la cuenta corriente y se enfrenta a una preocupante escasez de reservas.

Como hemos señalado en nuestro Panorama Económico mensual, estas tensiones entre la agenda de la “política-política” y la “política-económica” seguirán dando que hablar.

Menores expectativas de devaluación en el mercado

La curva de dólar futuro se sigue contrayendo, lo cual demuestra que el mercado sigue postergando las chances de ver un salto del tipo de cambio en forma discreta. En este sentido, se viene reduciendo la brecha entre lo que espera el mercado y el actual ritmo cambiario. Semanas atrás, el spread era significativo, con un BCRA devaluando al 6,5% y el mercado esperando una devaluación mensual del 9%. Hoy el BCRA continúa convalidando una devaluación en torno al 6,6%, mientras que el mercado espera que se mantenga el actual ritmo en el primer semestre del año que viene, e incluso que perfore el 6% desde junio. Las menores expectativas devaluatorias de corto plazo le permitieron al BCRA mejorar su posición vendida en dólar futuro: en octubre-último dato- ascendía a USD 1.340 M, lejos de los casi USD 7.100 M de julio.

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