El saldo comercial fue de USD 2.498 M en noviembre, representando el saldo más elevado desde mayo del año pasado y acumulando 24 meses consecutivos de superávit comercial. De esta manera, restando un mes para que finalice el año, el superávit alcanzó USD 9.357 M hasta noviembre, mostrando una caída de -45,7% i.a. respecto al acumulado del año anterior.
Por último, el índice de términos del intercambio, calculado como el cociente entre el índice de precios de las exportaciones y el índice de precios de las importaciones, alcanzó un nivel de 139,3, lo que representó una caída de -3,5% i.a. De esta manera, si hubieran prevalecido los precios de noviembre de 2024, el saldo comercial habría registrado un superávit de USD 2.776 M. A diferencia de lo que ocurrió durante el año, durante este mes el país registró una pérdida en los términos del intercambio por USD 289 M.
En suma, el resultado comercial mantendrá el superávit en el acumulado del año, aunque con una importante caída respecto al resultado del año anterior. De esta forma, estimamos que el saldo comercial se ubique levemente por encima de los USD 10.000 M en el acumulado de 2025.
El saldo comercial fue de USD 2.498 M en noviembre, representando el saldo más elevado desde mayo del año pasado y acumulando 24 meses consecutivos de superávit comercial. De esta manera, restando un mes para que finalice el año, el superávit acumulado alcanzó USD 9.357 M hasta noviembre.
Al interior, la balanza comercial energética nuevamente mantuvo el superávit: las exportaciones fueron USD 1.008 M (+52,8% i.a.), mientras que las importaciones fueron de USD 149 M (+12,9% i.a.). De esta manera, el saldo comercial energético fue de USD 859 M en el mes y acumuló USD 6.911 M en el acumulado hasta noviembre.
Por un lado, las exportaciones fueron USD 8.096 M, exhibiendo una suba de 24,1% i.a. Además, mostraron un crecimiento mensual de 12% en términos desestacionalizados -mostrando niveles máximos para la serie desestacionalizada desde el año 1996, al inicio de la serie- y una suba de 28,0% i.a. en las cantidades exportadas (con precios con una caída de -3,0% i.a.). Al igual que lo observado durante este año, cabe destacar que las cantidades de las exportaciones se mantienen en niveles máximos de las últimas décadas al observar el acumulado de enero-noviembre.
Al interior, destacó la mejora en las exportaciones de Productos Primarios (PP), que subieron 87,1% i.a. en el mes (USD 2.016 M). El crecimiento se explicó por unas cantidades que subieron 92% i.a. (y precios levemente con caída, -2,6% i.a.). El elevado crecimiento de este rubro -y de manera más general de la suba desestacionalizada de las exportaciones totales- tiene su correlato con la política implementada de la quita transitoria de retenciones para los granos (hasta alcanzar un monto de USD 7.000 M) llevada a cabo en septiembre, donde si bien las operaciones fueron realizadas en ese mes -dado que el cupo se acabó rápidamente-, el impacto se mantiene en la medida que se concretan los envíos.
Por su parte, le siguió la mejora en las Manufacturas de Origen Industrial (MOI) por USD 2.318 M (+14,5% i.a.), mientras que las Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA) mostraron un desempeño estable respecto al año anterior por USD 2.754 M (-0,4% i.a.).
Cabe destacar también que la mejora de las exportaciones en el mes se explicó también por el incremento de las ventas externas hacia China, que ya acumuló tres meses consecutivos ubicándose como el principal destino de las exportaciones (algo que no fue la regla en el acumulado del año, ubicando a Brasil como principal destino). En números, las exportaciones fueron USD 1.317 M en el mes, representando una suba de 274,5% i.a. e impulsado por la quita transitoria de retenciones mencionado anteriormente.
Por su parte, las importaciones fueron USD 5.598 M, trepando 6,6% i.a. en noviembre, explicado por una suba de 6,1% i.a. en términos de cantidades y 0,4% i.a. en precios. A diferencia de las exportaciones, cayeron -6,9% en términos desestacionalizados. En este sentido, se puede entrever una fuerte desaceleración de las compras externas (consolidado con una caída mensual) en contraste a los meses previos, posiblemente afectado por un mal desempeño de la actividad económica durante noviembre -en este sentido, el índice líder y otros indicadores adelantados de actividad económica, como patentamientos, producción de vehículos, índice construya, mostraron una caída en el anteúltimo mes del año-. Además, durante el periodo de ruido electoral, pudo jugar cierto impacto de adelantamiento de importaciones que se revirtió en los meses posteriores.
En este marco, se acentuó lo que venimos observando los meses previos: las mejoras más significativas se observan en los rubros de importaciones vinculados al consumo, mientras que los rubros vinculados al proceso de producción mostraron subas más acotadas, o incluso caídas.
En detalle, las mejoras interanuales más pronunciadas, principalmente vinculadas a rubros de consumo, fueron el rubro Resto (USD 99 M, +240,6% i.a.), explicado principalmente por el incremento de los envíos puerta a puerta, mientras que Vehículos automotores de pasajeros mostró un saldo de USD 510 M (+68,1% i.a.) y bienes de consumo mostró un saldo de USD 916 M (+23,9% i.a.). Por su parte, los bienes de capital mostraron un incremento de 13,1% i.a. (USD 1.054 M), mientras que mostraron caídas interanuales los Bienes intermedios (USD 1.789 M, -4,1% i.a.) y Piezas y accesorios (USD 1.081 M, -13,4% i.a.) como consecuencia de un desempeño acotado de rubros vinculados a la producción local.
Realizando un análisis de la mejora en el acumulado del año de las importaciones, se observa como el rubro Vehículos explicó la mayor parte del crecimiento interanual (42%), seguido de bienes de capital y partes (23%). Además, cabe mencionar como el rubro “resto” explicó el 5% del crecimiento de las importaciones, cobrando una importante relevancia en contraste a años previos en la medida que se flexibilizaron las restricciones a la entrada de bienes finales.

Por último, el índice de términos del intercambio, calculado como el cociente entre el índice de precios de las exportaciones y el índice de precios de las importaciones, alcanzó un nivel de 139,3, lo que representó una caída de -3,5% i.a. De esta manera, si hubieran prevalecido los precios de noviembre de 2024, el saldo comercial habría registrado un superávit de USD 2.776 M. A diferencia de lo que ocurrió durante el año, durante este mes el país registró una pérdida en los términos del intercambio por USD 289 M.
¿Qué esperamos para los próximos meses?
Durante diciembre, posiblemente veamos un escenario similar al observado en noviembre. Por un lado, un contexto recesivo en determinadas ramas industriales continuará impactando sobre las importaciones vinculadas a la producción, sumado a que la relativa estabilidad y previsibilidad cambiaria (recientemente, con el anuncio sobre la actualización al ritmo de la inflación de las bandas cambiarias) podrían disminuir el efecto “incentivo” a adelantar compras externas. En este sentido, estimamos que las importaciones continúen creciendo, pero desacelerando su ritmo de mejora en el corto plazo.
Por el lado de las ventas externas, posiblemente se vea un efecto residual del efecto de la quita de retenciones transitorias, que continuaría impactando al menos marginalmente sobre las exportaciones de diciembre. En este sentido, el 9 de diciembre el Gobierno anunció la baja permanente en las alícuotas de los derechos de exportación: la soja pasa de 26% a 24% y subproductos de 24,5% a 22,5%, trigo y cebada disminuyen de 9,5% a 7,5%, maíz y sorgo de 9,5% a 8,5% y girasol de 5,5% a 4,5%. Esta medida se da en un contexto de menores liquidaciones actuales dado el adelantamiento previo, y busca dar la señal de mejora de la competitividad del sector, buscando mejorar el precio efectivo y acelerar las ventas durante el comienzo de 2026. Además, también cabe destacar que prepara el terreno para una cosecha de trigo que viene siendo récord.
Con todo, el resultado comercial arrojará un superávit superior a USD 10.000 M en 2025. Si bien es un número inferior al del año pasado, es un valor que supera lo esperado algunos meses atrás por el consenso del mercado.


