Panorama Político (Synopsis consultores)
“La PASO definió la elección y nos dejó una larga transición que requerirá de coordinación entre el Gobierno saliente y el entrante”
LA ELECCIÓN TERMINÓ
La elección presidencial concluyó este 11 de agosto. Restará conocer los resultados definitivos en materia de asignación de escaños legislativos y algunos ejecutivos municipales, pero Alberto Fernández fue electo informalmente ayer como nuevo Presidente de la Argentina a partir del 10 de diciembre próximo.
LA SITUACIÓN ECONÓMICA COMO PRINCIPAL FACTOR EXPLICATIVO
Si bien un resultado electoral nunca tiene una explicación monocausal, a la hora de evaluar las motivaciones de un resultado de estas características hay que mencionar la delicada situación económica. El resultado es un voto castigo a un Gobierno que, no supo o pudo resolver los problemas esenciales de la economía de los argentinos: caída del poder adquisitivo, pérdida de empleo y deterioro de la calidad de vida.
EL CORRIMIENTO DE CFK, LA LLAVE POLÍTICA DEL RESULTADO
El principal factor político fue la unificación del Peronismo, que salvo excepciones como la de Schiaretti, se mostró unido. La combinación de crisis económica más Peronismo unido terminaron siendo letales para un Gobierno que había generado una gran expectativa que no pudo satisfacer.
UN GOBIERNO SIN DIAGNÓSTICO DE LA REALIDAD, CON ERRORES DE CÁLCULO
Las decisiones electorales que tomó el Gobierno adolecieron de dos defectos: nunca se dimensionó con precisión el drama que estaba generando la crisis económica en la gente, y por ese diagnóstico errado las decisiones electorales, fundamentalmente la decisión de Macri de ir por su reelección, fueron desacertadas. En retrospectiva, fue un error del oficialismo de no dar el debate económico.
LA TRANSICIÓN
La Argentina va a enfrentar un escenario inédito, una transición con un candidato “electo” con cuatro meses de antelación en un contexto de alta incertidumbre económica con un mercado sediento por conocer: 1) los lineamientos generales de la política económica de Alberto Fernández; 2) las medidas de corto plazo que deberá tomar un Gobierno saliente para morigerar la volatilidad.
La situación va a requerir de coordinación de acciones entre el Gobierno saliente y el entrante. Pero, en la medida que no prime la responsabilidad de ambos actores, la coordinación quedará presa de los intereses individuales. El Gobierno saliente tiene incentivos a hacerle pagar al éxito de su rival las consecuencias económicas, y el candidato opositor a hacerle pagar al oficialismo la turbulencia económica.
EL GOBIERNO DE ALBERTO FERNÁNDEZ
Alberto Fernández será un Presidente con autonomía, más allá del origen de que su candidatura la definió Cristina Kirchner. No habrá grandes condicionamientos por parte de la ex Presidenta, salvo en tres áreas donde proyectamos que CFK querrá tener alguna injerencia: 1) Relación del Poder Ejecutivo con la Justicia; 2) Política Exterior: la política regional estará condicionada por la política exterior que tuvo la ex Presidenta. Es decir, cercanía con las posiciones que Uruguay ha venido sosteniendo en la región y alejamiento de las posturas del Brasil de Bolsonaro; 3) Relación de Kicillof con el poder territorial bonaereanse: Cristina le exigirá a Alberto Fernández que los recursos que la Nación vuelque a la Provincia pasen por las manos del futuro Gobernador.
HOMBRES CLAVES: FELIPE SOLÁ, MÁXIMO KIRCHNER, SERGIO MASSA, Y GOBERNADORES
La llegada de Alberto Fernández a la presidencia dejará un nuevo mapa del poder. Allí hay que situar a Felipe Solá como un actor clave y protagónico, posiblemente con funciones en el Ejecutivo. También Máximo Kirchner tendrá un rol destacado como interlocutor con el kirchnerismo. El papel de Sergio Massa (probablemente Presidente de la Cámara de Diputados) será relevante porque le ofrece a Alberto Fernández un contrapeso al poder de La Cámpora en la Provincia de Buenos Aires. También los Gobernadores serán un contrapeso al poder de Cristina y el kirchnerismo. Entre ellos, hay que resaltar el papel de Juan Manzur (el más cercano a Alberto Fernández), y destacar el papel que tendrán los Gobernadores de Córdoba (Schiaretti) y Santa Fe (Perotti).
EL EQUIPO DE GOBIERNO
Santiago Cafiero, colaborador más cercano de Alberto Fernández en la campaña, tendrá un lugar destacado en el Gabinete. En el área Económica, Matías Kulfas y Cecilia Todesca son los economistas de máxima confianza. En materia de Relaciones Exteriores, un hombre a seguir será Jorge Arguello, Embajador ante la ONU (2007-2011) y en los Estados Unidos (2011-2013).
EL RETORNO DE UN CICLO DE GOBIERNO EN MAYORÍA
Es probable que Alberto Fernández pueda controlar ambas cámaras del Congreso. Esto significa que, tras cuatro años, Argentina volvería a tener un gobierno de mayoría legislativas, lo que facilitaría al Ejecutivo la sanción de leyes y reformas estructurales necesarias.
Panorama Económico (Ecolatina)
“Una transición económica muy peligrosa: en busca de un ancla nominal”
IT´S THE ECONOMY, STUPID
La fuerte caída del salario real, la destrucción de empleo formal, la precarización laboral, el fuerte aumento de la pobreza y la indigencia y el incremento de la desigualdad que dejó la crisis cambiaria/financiera de mediados de 2018 explica el voto castigo al oficialismo, que Alberto Fernández supo capitalizar.
En el siguiente gráfico se puede observar un repaso de la magnitud de las últimas crisis económicas de la Argentina. La caída del PBI en los últimos meses fue inferior a la de la crisis global de 2008-09. Sin embargo, la caída del salario real formal alcanzó los dos dígitos (siendo el retroceso del poder adquisitivo del trabajo informal aún mayor), algo que no se observaba desde la gran crisis del 2001-2002.
BAILANDO EN LA CUBIERTA DEL TITANIC
A cuatro meses de que asuma el próximo presidente electo, la transición económica promete ser traumática. El presidente de la Nación asoció el shock cambiario/financiero sufrido el día después de las PASO (el Merval se desplomó 32%, el dólar trepó más del 20% y el riesgo país superó los 900 puntos básicos) a la falta de credibilidad que genera en los mercados el triunfante opositor, rompiendo la posibilidad de acordar una transición ordenada que ayudaría a calmar las presiones.
Matías Kulfas, uno de los economistas de confianza de Alberto Fernández cargó la responsabilidad de lo sucedido en el día de hoy a la administración Macri, pero también trató de enviar señales tranquilizadoras a los mercados: se honrarán los compromisos en moneda extranjera y no volverá el cepo cambiario.
Puede haber aquí un elemento estabilizador: a medida que se acerque la fecha en que Alberto Fernández asuma, mayores serán las señales conciliadoras hacia el mercado. Mientras tanto, la falta de coordinación entre ambos espacios políticos dejará expuesto al país frente a una a elevada demanda de dólares.
TIBIA REACCIÓN DEL BCRA ANTE LA EFERVESCENCIA
El Banco Central de la República Argentina estuvo durante los últimos meses de calma cambiaria/financiera acumulando poder de fuego para enfrentar un escenario disruptivo. Finalmente, el día temido por el Central llegó: cuando el tipo de cambio perforó la banda superior (51,5 ARS/USD), subió 10 p.p. el rendimiento de las LELIQ, intervino en el mercado de Futuros y vendió USD 100 M de reservas internacionales.
Pese a que el BCRA apeló a todas las herramientas disponibles, la venta de reservas (USD 100 M) fue acotada en relación a su nuevo poder de fuego: el FMI autorizó al Central a vender por lo menos USD 250 M si el tipo de cambio supera el techo de la banda cambiaria. Es probable que el Central no haya querido mal gastar municiones, ya que no sabe a ciencia cierta a qué valor puede alcanzarse una nueva tregua cambiaria. Sin embargo, en un contexto de falta de cooperación (reparto de culpas) entre oficialismo y oposición, solo una intervención fuerte del BCRA puede ponerle un techo al dólar. Por ende, la pericia de las autoridades será clave para restablecer la normalidad en el mercado de cambios.
LAS VARIABLES NOMINALES DESANCLADAS
Pese a la suba de tasas, el BCRA renovó sólo el 5% de los vencimientos de las LELIQ, lo que implica que el sistema financiero se está haciendo de liquidez ante posibles retiros/dolarización de depósitos en pesos. Asimismo, desapareció la oferta de crédito bancario y se suspendió la venta de bienes dolarizados (como autos) ante la falta de referencia de valores nominales.
Este nuevo episodio de crisis cambiaria/financiera tendrá un impacto en las variables reales. La fuerte depreciación del Peso volverá a acelerar la inflación posponiendo la recuperación del poder adquisitivo de las familias (trabajadores, jubilados, etc.). La retracción del crédito tensará al máximo la cadena de pago (riesgo latente de ruptura) y la elevada volatilidad/incertidumbre volverá a frenar la recuperación de la actividad en lo que resta del año. Esto implica un importante deterioro de las condiciones económicas con las que iniciará la próxima administración.
LA POLÍTICA ECONÓMICA DE ALBERTO FERNÁNDEZ
El escaso margen de maniobra del próximo presidente electo en el frente externo llevará al candidato opositor a buscar recomponer la confianza con los mercados de capitales. Sin desembolsos frescos del FMI, con escasas reservas netas y elevados vencimientos de deuda en moneda dura, la próxima administración deberá conseguir financiamiento en el mercado internacional para evitar un mayor ajuste de la demanda interna (colapso de las importaciones que genere divisas comerciales para pagar los compromisos externos).
Esperemos que se encuentre rápidamente un nuevo equilibro nominal resultante del accionar oficial y las definiciones del programa económico del próximo presidente, a fin de poder restablecer un mínimo horizonte económico.