Las mayores exportaciones de enero desde 2008
En enero, el superávit comercial de bienes orilló USD 300 millones de la mano del mejor inicio del año desde 2008 para las exportaciones, que superaron USD 5.500 millones (+13% i.a.) y permitieron sostener importaciones por encima de los USD 5.000 millones (+37% i.a.) por noveno mes consecutivo. Sin embargo, el intercambio comercial no superó USD 11.000 millones y fue el menor registrado desde marzo del año pasado.
De todos modos, vale destacar que el valor de las importaciones luce abultado en parte producto del encarecimiento del costo del flete internacional. El mismo exhibe un incremento superior al 120% respecto a igual mes del año pasado y de 46% en los últimos cinco meses. En este sentido, el INDEC estima que este efecto incidió en casi 8 p.p. sobre la suba del precio de las importaciones.
En lo que refiere a lo rubros exportados, la expansión se concentró en los productos primarios (+80% i.a. en valores) gracias a un crecimiento de más de 40% en las cantidades exportadas. En este sentido, se destacaron las ventas externas de cereales (+102% i.a.), de la mano de la favorable cosecha fina. Por su parte, las manufacturas de origen industrial (MOI) y combustibles y energía treparon 32% i.a. y 12,5% i.a. respectivamente como consecuencia en la mejora de los precios -de hecho, la cantidad exportada de combustibles y energía cayó más de 30% en la comparación interanual-, mientras que las manufacturas de origen agropecuario (MOA) cayeron 25% en valores, también como resultado de una contracción en las cantidades.
Por otro lado, los distintos usos de las importaciones tuvieron un crecimiento bastante homogéneo, entre 30-45% i.a. en valores, a excepción de los vehículos, que cayeron casi 25% i.a.. No obstante, en este caso el incremento en los precios internacionales solo fue significativo para explicar el crecimiento de combustibles y lubricantes y bienes intermedios. Esta mejora en los términos del intercambio, captada por un efecto positivo mayor de los precios internacionales en nuestras exportaciones con relación al impacto negativo en las importaciones evitaron que la balanza comercial arranque el año en rojo (el INDEC estima que la ganancia fue de USD 309 millones).
¿Qué esperamos para los próximos meses?
El sector externo continúa sumando interrogantes para el futuro inmediato. En primer lugar, las perspectivas de una cosecha regular con importantes riesgos a la baja se mantienen por el lado de las cantidades. Si bien este efecto por el momento se estaría compensando con precios favorables, -el conflicto bélico entre Ucrania y Rusia continúa impulsando al alza los commodities- las acciones de la FED en materia de política monetaria -suba de las tasas de interés- implican riesgos adicionales.
También aparecen dudas en lo que refiere al costo de la energía a nivel mundial. Un deterioro de estas condiciones podría complicar aun más el saldo de bienes ante la mayor necesidad de energía durante el invierno. Por otro lado, también es un interrogante lo que ocurra con el crecimiento en el precio de los fletes, que podría incluso seguir incrementándose en caso de la continuidad del conflicto armado en Europa del Este.
El desenvolvimiento de estos factores externos determinará el margen con el que el país contará para financiar sus importaciones, necesarias para mantener el nivel de actividad -especialmente industrial- alcanzado durante 2021. Además, las cuestiones mencionadas convergen en las próximas semanas/meses, momento en que también deberá llegar a buen puerto la renegociación con el FMI para no agregar más incertidumbre al panorama.