Ventas de autos a concesionarios caen tras 21 meses

¿Qué pasó?

En mayo de 2018, la venta de la industria automotriz a los concesionarios marcó una contracción de -5% i.a., luego de 21 meses de crecimiento ininterrumpido. La caída se corresponde con menores ventas tanto de nacionales (-7% i.a.) como de importados (-4% i.a.). Cabe destacar que es la primera vez desde que asumió el gobierno de Cambiemos que las ventas mayoristas de importados se contraen. Por su parte, el crecimiento de la producción de vehículos se desaceleró y marcó un avance de sólo 3,5% i.a.

¿Qué factores explican la caída?

La corrida cambiaria le puso un freno a las ventas de la industria automotriz. Más del 70% de las ventas a concesionarios corresponden a rodados provenientes del exterior y la participación de las autopartes importadas en los vehículos de fabricación local es significativa. En consecuencia, la fuerte depreciación del peso se tradujo en un encarecimiento de los vehículos, lo que retrajo las ventas. Asimismo, en medio de la corrida, las terminales morigeraron su oferta ante la incertidumbre del nuevo precio de los vehículos. A ello se suma la previsión de una menor demanda interna por el deterioro de los salarios en dólares y el encarecimiento del crédito, en un sector donde más de la mitad de las compras se hace de manera financiada.

¿Cómo afecta nuestras proyecciones?

A la baja. Recortamos nuestra estimación de patentamientos para 2018 a 5%, por lo cual no se alcanzaría el objetivo de un millón de unidades para el año. La caída en las ventas mayoristas es el anticipo de la contracción de los patentamientos. A pesar del recorte en las estimaciones, las ventas minoristas concluirían cerca del récord de 2013 (956.875 unidades). La producción crecería 11%, también afectada por el menor crecimiento de Brasil y por el efecto negativo que ocasiona en la industria local el paro de camioneros en dicho país, dado que dificulta el acceso a las autopartes. De igual modo, la menor actividad automotriz hace prever un crecimiento más acotado de las industrias conexas, tales como plástico, acero y neumáticos.

Ventas récord de electrodomésticos

  • En el primer trimestre de 2018, la facturación de electrodomésticos y artículos para el hogar trepó 37% i.a. Al mismo tiempo, los precios del rubro, según el IPC GBA Ecolatina, subieron 20% i.a. Si suponemos que la inflación del sector en el interior del país fue similar a la registrada en el GBA, las cantidades vendidas se incrementaron 15% i.a. a nivel nacional, alcanzando volúmenes récord para los primeros tres meses del año.
  • Varios son los factores que influyeron en la buena performance del sector. Por un lado, los precios del rubro se movieron a una menor velocidad que el promedio de precios de la economía: el IPC General creció 26% promedio anual durante los primeros tres meses, es decir, 6 puntos porcentuales por encima de los precios del rubro. En este sentido, la supresión del impuesto interno para celulares, televisores LCD, microondas y aires acondicionados fabricados en Tierra del Fuego y la reducción del 17% al 10,5% para los elaborados fuera de la isla (tanto nacionales como importados), permitió que los precios internos del rubro se abarataran en términos relativos. De la misma manera,  la eliminación del arancel del 35% para la importación de notebooks, tablets y computadoras implementada a principios de 2017, contribuyó a la dinámica de precios. Particularmente, el consumo de computadoras creció 65% i.a., las cocinas eléctricas y microondas 19% i.a., los teléfonos celulares del 7% i.a. y los aires acondicionados 3% i.a.
  • Por otro lado, el movimiento alcista del tipo de cambio que comenzó en diciembre de 2017 y que continuó en el primer trimestre de 2018, generó adelantos de consumo que impulsaron las ventas del sector. A ello se sumó el incremento estacional de la demanda de televisores por el mundial, los cuáles crecieron en unidades 20% i.a. en los primeros tres meses del año.
  • Adicionalmente, el crecimiento de los créditos para el consumo (herramienta clave en el sector) y las mejores condiciones macroeconómicas (el PBI creció 3,4% i.a. en el primer trimestre), mejoraron las expectativas de compra de los consumidores, dinamizando la demanda del rubro. En esta línea, el rubro electrodomésticos dentro del Índice de Confianza del Consumidor durante los tres primeros meses de 2018 fue, en promedio, 44% mayor que hace un año atrás.
  • No obstante, para lo que resta del año las perspectivas para el consumo de electrodomésticos no son optimistas. Se espera que el volumen de ventas experimente un fuerte freno por un contexto macroeconómico más adverso tras la corrida cambiaria. La desaceleración de la economía, un nivel de empleo estancado, la aceleración de la inflación y una fuerte caída del salario en dólares, afectarán negativamente las ventas. A esto se suma el efecto negativo de la fuerte suba de tasas sobre el costo de los planes en cuotas y el salto del tipo de cambio que pondrá en los próximos meses presiones sobre los precios internos, encareciendo los equipos provenientes del exterior. Un atenuante en el segundo trimestre, serán las compras de televisores para el Mundial. Sin embargo, no será suficiente para que el sector culmine el 2018 en terreno positivo, por lo que se proyecta una leve caída del 0,6% i.a.