Los precios libres aumentan todos a la misma velocidad y no es una buena noticia

Con cada cambio de precios relativos la inflación se acelera

La inflación anual en nuestro país es de dos dígitos desde hace más de diez años y, más allá de los vaivenes causados por los incentivos electorales, ha exhibido una tendencia creciente. Así, en la primera mitad de la década pasada la inflación anual promedió casi 28%, teniendo su pico de casi 38% en 2014, un registro muy cercano a la media de la segunda mitad de la década, cuando solo en 2017 se observó una inflación inferior al 30%.

Distintos fueron los factores que propiciaron las sucesivas aceleraciones y desaceleraciones a lo largo de todos estos años: en 2014 el tipo de cambio mostró un salto discreto que aceleró la inflación de forma significativa, en 2016 la aceleración también estuvo relacionada con el mercado cambiario, pero se sumaron aumentos de tres dígitos en los servicios públicos, situación que volvió a observarse en 2018. En cada uno de estos episodios las distorsiones previas (atraso cambiario o tarifario) se saldaron con un reacomodamientos de precios relativos que aceleró la inflación. La experiencia histórica nos marca que cuanto mayores y abruptas son las distorsiones en los precios, más probable es que den lugar a incrementos que aceleren la inflación.

En este marco, nos preguntamos si la actual aceleración inflacionaria es producto del reacomodamiento de algunos precios como en las experiencias pasadas o, por el contrario, es un proceso en el que los precios tienden a moverse de forma homogénea.

¿La actual aceleración es producto de algunos ajustes puntuales?

Como marcamos, en 2014, 2016, 2018 y 2019 la inflación se aceleró por saltos cambiarios y tarifarios que impactaron rápidamente en algunos grupos puntuales. En todos estos casos, primero aumentaron los bienes (y los servicios públicos en 2016 y 2018) y luego el resto. Es decir, un grupo de bienes traccionó la inflación y luego lo siguió el resto. Este no parece ser el caso en 2021. Veamos.

Son múltiples las formas de medir la distorsión o cambios en precios relativos, una de ellas es comparando las dinámicas de las variaciones de los distintos capítulos del IPC respecto al promedio de estas variaciones. Así, la variabilidad o dispersión sería mayor cuanto mayor sea la diferencia entre los aumentos de cada capítulo y el promedio. Como mencionamos anteriormente, es de esperar que este indicador guarde una relación directa con la dinámica inflacionaria, cuando la inflación se acelera la dispersión debería aumentar.

En el siguiente gráfico cada punto es la combinación entre inflación promedio de los capítulos que componen el IPC y variabilidad de esos aumentos. Se observa, como comentamos previamente, una relación positiva entre ambas variables, pero también pueden verse cuatro “zonas”. Los puntos verdes son meses en los que la inflación fue alta y los aumentos heterogéneos, la mayoría de estos puntos pertenecen a 2018, año en los que la inflación fue traccionada por saltos cambiarios y tarifarios. Los puntos amarillos representan aquellos meses en los cuales la inflación fue “baja” y los aumentos heterogéneos, muchos de estos puntos pertenecen a 2020, año de desaceleración de la inflación aunque a velocidades distintas. Los puntos rojos esconden meses en los cuales la inflación fue “baja” y los aumentos homogéneos, buena parte de 2017 está en este cuadrante. Por último, los puntos azules son meses en los que la inflación fue alta y los aumentos homogéneos, aquí aparecen muchos meses de 2019 y 2021. Abril de este año es un claro ejemplo, la inflación se posicionó en 4,1% y siete de los doce capítulos del IPC aumentaron entre 3,5% y 4,3%.

Alta inflación y aumentos homogéneos, ¿debemos preocuparnos?

Sí, la homogenización de la inflación genera algunas inquietudes. La primera e inmediata es que este comportamiento se está dando incluso sin un salto cambiario de magnitud. Si bien es cierto que la emisión récord de 7% del PBI del año pasado y el hecho de que cada vez más empresas tuvieron que recurrir a divisas propias para importar son factores que pueden explicar esta tendencia, la aceleración de los últimos siete meses no deja de ser preocupante.

Por otro lado, las expectativas de inflación son una cuestión a atender. Si los precios libres se mueven más o menos en la misma magnitud se dificulta la recomposición de precios relativos. La evolución del nivel de precios no está traccionada por ninguno de sus componentes en particular; no ocurre porque suben las tarifas tras casi dos años de congelamiento, porque los bienes de consumo masivo recuperan su precio relativo pre-pandemia o porque hay significativos aumentos salariales por encima de la inflación que justifican una remarcación en rubros más vinculados a los servicios privados. No hay una causa y, por lo tanto, controlar el proceso inflacionario y retornarlo a valores más cercanos al 2% es una tarea más compleja.

En una economía que presenta un creciente peso de los subsidios económicos y que está en las vísperas de un acuerdo con el FMI, en donde el salario registrado promedió caerá por cuarto año consecutivo, y la extensión a los controles de precios condicionan la oferta de muchos bienes de consumo, no es de esperar que, en virtud de revertir estos desequilibrios, la inflación se aleje del 3% mensual del período 2017-2020, durante este año y el próximo. En ambos casos, esperamos que la inflación anual continúe en la zona de 40-50% hasta 2022 inclusive.

 

El impacto residual de la vacunación

A poco más de tres meses de las elecciones legislativas de septiembre, el impacto de la vacunación dentro del electorado no parecería ser suficiente. La imagen positiva del gobierno tan solo crece un 13% entre los ya vacunados, esto se explica casi en su totalidad por la mejora que se verifica en el universo de los votantes del Frente de Todos.

En cuanto a la intención de voto, se verifica una mejora significativa entre los votantes propios, mientras que se observa una mejora casi residual en el campo opositor. A la variable política, es necesario sumarle la variable etaria al análisis del impacto de la vacunación, por un sencillo motivo: el universo de los vacunados tiene, por ahora, sobrerrepresentada a la población adulta mayor, que es la que primeramente está siendo vacunada. Suena lógico entonces anticipar que, en los segmentos más jóvenes, el impacto de la vacunación será aún más residual que el que se está viendo hasta aquí.

Sin embargo, si bien el impacto directo no pareciera mostrar significativas variaciones entre los votantes, sí lo hace de una manera indirecta ante una posible vuelta a la normalidad mejorando la salud de la economía.

En términos generales, entre los menores de 50 años, a la hora de señalar el principal problema que afecta al país, más del 50% indica problemas económicos (inflación y desempleo). Esta es una preocupación que se profundiza aún más en el segmento más joven (ambos problemas reúnen el 58,8%). Estas variables implican una mayor preocupación entre los propios votantes del Frente de Todos.

Una vacunación masiva podrá permitir que la economía recupere cierta normalidad, y eso ya será todo un beneficio electoral para el oficialismo frente a estas preocupaciones. O por lo menos, podría generar una recuperación de las expectativas sobre el futuro o una esperanza de que lo peor de la pandemia – económicamente hablando – ya pasó.

En la actualidad el Frente de Todos se encuentra en los niveles más bajos de apoyo electoral, con un nivel de desencantados que ya roza el 30%. Esta caída en el caudal electoral no necesariamente puede llevar al oficialismo a obtener menos bancas de las que renueva en la elección de medio término. El escenario aun así demuestra la ventaja que ofrece el escenario de renovación del oficialismo que incluso sacando un 25% menos de votos que en 2019, podría estar perdiendo solo una banca en la Cámara baja, quedando a 11 votos de poder sancionar leyes.

En cuanto la escena electoral en Provincia de Buenos Aires particularmente, allí se encuentra el nivel más alto de desencantados. Este segmento es clave para definir el rumbo de la elección. Si nos guiamos por el porcentaje de votantes del Frente de Todos que nos dicen que hoy volverían a votar al oficialismo, de aquel 52,2 de votos del 2019, hoy el oficialismo estaría reteniendo el 63,8% de esos votos (33,4/52,2), según nuestro estudio de mayo en PBA.

La decisión que tomen esos votantes desencantados (votar efectivamente alguna fuerza opositora o reincidir en el voto al Frente de Todos) será determinante en el resultado. Y en buena parte, su decisión dependerá no solo de si el contexto económico o sanitario mejora o empeora, sino también de las alternativas que se le ofrezcan en la góndola. Si la oferta peronista no oficialista (Florencio Randazzo) no seduce, y si Juntos por el Cambio no logra despegar su identidad del fracaso de Macri, posiblemente los votantes blandos desencantados del oficialismo puedan pensar que apoyar al Gobierno pudiera ser un mal menor.

 

¿La gran apuesta? Elecciones y dólar

¿Cómo evolucionó el mercado de cambios en mayo?

Terminó mayo y el Banco Central siguió desacelerando el ritmo de depreciación tipo de cambio oficial – con una depreciación mensual de “tan solo” 1,2%, cerró el mes con la menor variación mensual desde enero 2020 – y recomponiendo reservas.

Aun sin los datos de los últimos tres días hábiles del mes, lleva comprados casi USD 2.000 millones (récord de los últimos 10 mayos) y aumentó las Reservas Netas en casi USD 1.500 millones (también una variación mensual récord para un mayo de la última década), un resultado posible gracias a la espalda del agro y la mano visible del Estado (cepón y restricciones al MULC para importadores).

Sin embargo, comienza a jugarse una gran apuesta en el mercado asociada al calendario electoral, la cual se refleja en el mercado de bonos y en el de futuros.

Estrategia cambiaria en modo electoral: ¿qué señales nos da el mercado?

En el mercado de renta fija, la curva de los bonos dólar linked está invertida, lo cual es una clara señal de una mayor depreciación esperada post-elecciones. ¿Por qué? Si bien es una curva compuesta por tan solo tres bonos, el de menor duration  (con vencimiento pre electoral) tiene una TIR mayor al de mayor duration  (con vencimiento post electoral). Dado que son bonos que ajustan por la evolución del tipo de cambio oficial, el exceso de oferta del primero indica que el mercado descuenta una menor depreciación del tipo de cambio antes de las elecciones, lo cual se refleja en un menor precio y una mayor TIR. Análogamente, se espera una mayor depreciación luego de los comicios, motivo por el cual el bono con vencimiento en abril del 2022 (TV22) está más demandado, tiene un mayor precio y, por ende, una menor tasa interna de retorno.

Algo similar viene sucediendo en el mercado de futuros con las tasas implícitas de los futuros del dólar oficial, como puede apreciarse en el siguiente gráfico:

Si bien el volumen e interés abierto de los futuros del tramo largo de la curva es muy bajo, no por ello son irrelevantes. Mientras hace tan solo dos meses podíamos arbitrar cobertura pre-electoral por post-electoral con poca diferencia en TNA, ahora la ¿gran divergencia? entre las tasas implícitas de los futuros con vencimiento pre electoral y post electoral es clara. El mercado ve posible el uso del tipo de cambio oficial como ancla cambiaria hasta las elecciones… pero insostenible en el mediano plazo. ¿Ganará la gran apuesta?

Análisis y acción

La potencial modificación del calendario electoral nos obliga a seguir de cerca el movimiento de los futuros alrededor de dichas fechas, con oportunidad de arbitrar entre las mismas. Los valores actuales (por debajo de la inflación esperada y, consecuentemente, negativos en términos reales) siguen siendo valores razonables para tomar cobertura y esperar algún movimiento cambiario que baje la expectativa post electoral, o un relajamiento que vuelva a generar oportunidades para plazos post electorales. De no poder dolarizar saldos o adquirir instrumentos dólar linked, tiene especial sentido contar con cobertura cambiaria.

* El presente artículo es un extracto del Informe Financiero Semanal, exclusivo para suscriptores del Módulo Financiero de Ecolatina.

Paritarias, vacunación y obras sociales en el centro de la escena sindical

La incertidumbre acerca de los valores que la inflación tomaría a lo largo de este 2021 fue mermando con el pasar de los meses, particularmente si se observa la inflación acumulada del 17,6%. Lo que resulta claro es que el 29% que el Ministro Guzmán proyectaba en el Presupuesto quedó atrás. En este marco los sindicatos debieron enfrentar sus acuerdos paritarios. De hecho, si se observa la evolución agregada de los acuerdos paritarios, se verifica una tendencia claramente alcista en los últimos acuerdos.

¿Cómo vienen las paritarias en el 2021?

Bancarios inauguró el año paritario con un acuerdo de 29% en enero que incluía una cláusula de revisión. Luego se fueron dando acuerdos que intentaban respetar esa pauta establecida en el Presupuesto 2021 y fijada por el Gobierno para tratar de contener la puja distributiva dentro de los parámetros establecidos para la política macroeconómica. Pero lentamente empezaron a aparecer acuerdos que se acercaban más al 40% que al 30% inicial. UOCRA, UTA y Ferroviarios estuvieron este mes en la parte alta de rango de 30-40% de aumento. Por su parte, el acuerdo semestral de Judiciales, si se anualiza, también se acerca al 40%. Quien podría romper este techo podría ser Camioneros que ya se encuentra en negociaciones para celebrar su acuerdo paritario 2021-2022.

Fuente: elaboración propia en base a acuerdos celebrados.

Si bien se puede apreciar una tendencia alcista en los acuerdos salariales, si tomamos las proyecciones que realiza el mercado sobre la inflación, se encuentran más cercana al 50% que al 40% por el que hoy pelean los trabajadores. Difícilmente entonces este año se pueda recuperar algo de lo que la mayoría de los salarios vienen perdiendo en años anteriores.

No solo preocupa la inflación y el desempleo, también la vacunación y la caja de las obras sociales

En el contexto de la pandemia del coronavirus, los sindicatos no solo se deben enfrentar a los desafíos de la inflación y el desempleo sino también al colapso del sistema de obras sociales y a los reclamos de los trabajadores por ser rápidamente vacunados.

El sistema de obras sociales ya traía problemas de desfinanciamiento previo a la crisis del COVID, y que frente a la pandemia esos problemas no hicieron más que agudizarse. En particular, el sistema tiene serias dificultades para sostener el Sistema de Prestaciones Básicas en Habilitación y Rehabilitación Integral a favor de las personas con discapacidad.

Para paliar esta situación el gobierno de Alberto Fernández accedió a unos de los pedidos históricos de los dirigentes con relación a la situación financiera de las obras sociales. Modificar el mecanismo de libre elección de la obra social. Consiste en que los afiliados deban permanecer en la obra social de su actividad un tiempo determinado antes de disponer el traspaso de los aportes a otro efector. Sin embargo, los problemas financieros no se solucionarán únicamente con esta modificación.

 

Imagen negativa del Gobierno: la más alta desde el inicio de la gestión

¿Cómo evolucionó la imagen del Gobierno en el último mes y cambios son las principales preocupaciones de la sociedad?

El gobierno alcanza en mayo los valores más altos de imagen negativa desde comienzos de su gestión, superando el 60%, con 5 de cada 10 encuestados afirmando que el desempeño es “Muy Malo”. Justo a un año de haber alcanzó el más alto valor en cuanto a imagen positiva (64,3% en abril 2020), mayo de este año arrojó el nivel más bajo de todo el ciclo con solo el 26,2% de valoración positiva.

A pesar de los esfuerzos por dinamizar la vacunación contra el Covid-19, y con el arribo al país de más de 17 millones de dosis, al electorado estos números parecen no alcanzarle. La corrupción y la inflación siguen siendo las principales corrupción de la ciudadanía, dejando el manejo de la pandemia en un cuarto lugar, por detrás del desempleo. Es decir, las variables económicas son las que se llevan más del 48,1% del interés ciudadano.
La preocupación por la salud continua su tendencia decreciente, alcanzando los valores más bajos desde el comienzo de la pandemia, con alrededor del 5%.

¿Qué expectativas tiene la gente de cara a los próximos meses?

De hecho, si se desagregamos la preocupación en base a los diferentes perfiles de votantes del año 2019, los propios votantes del Frente de Todos son aquellos más preocupados por las cuestiones económicas, principalmente la inflación seguida del desempleo, alcanzando el 63% de su interés . Mientras que los principales grupos opositores ponen el foco en la corrupción.

La segunda ola del coronavirus genera nuevamente caídas en las expectativas sobre el futuro económico del país para los próximos 12 meses. El 61,4% de los encuestados considera que la situación económica será peor a la actual, y tan solo el 21,5% cree que la situación mejorará en los próximos 12 meses. Por su parte, en términos personales, las creencias son un tanto más moderadas: en mayo, el 48,2% de los encuestados considera que su situación empeorará, y solo el 19% cree que estará mejor.

¿Qué evaluación realiza la sociedad de la gestión sanitaria?

En cuanto al caso particular de la gestión sanitaria, el gobierno no logra recuperar la valoración positiva que supo conseguir un comienzo de la pandemia. Alcanzando un 60% de valoración negativa, con casi la mitad de los encuestados considerándola “Muy Mala”. El gobierno no logró alcanzar siquiera el 30% de aprobación en relación a las medidas sanitarias impuestas.

Con relación a la disyuntiva “Salud vs Economía” asumiendo que para controlar una de las dos variables será necesario dejar de lado la otra, como se planteó en algún momento, el 32,8% de los encuestados considera necesario asumir el riesgo de contagiarse con tal de garantizarse su fuente de ingresos. Otro 20% de los encuestados toma una postura más neutral, pero reconociendo la necesidad económica, mientras que tan solo un 15,3% prefiere no exponerse al contagio debido a lo delicada de la situación sanitaria. Evidentemente la sociedad le fue perdiendo el miedo a la enfermedad, a pesar de que sigue existiendo un 15,1% que reconoce tener “Mucho Temor”, similar al número de quienes prefieren no exponerse al virus a pesar de implicar un riesgo para sus ingresos .

¿Cuál es la situación del oficialismo frente a las elecciones legislativas de septiembre?

La tendencia en el deterioro del caudal electoral continúa y pareciera no detenerse, desde julio del 2020. Los niveles de intención de voto de mayo perforan el 30% a nivel nacional. En paralelo, el voto por otras fuerzas políticas alcanza su nivel más alto en mayo con 61,7%.

En síntesis, al gobierno de Fernández no pareciera alcanzarle una mejora en el ritmo de vacunación para captar al electorado, esta no parece ser una variable que vaya por encima del posicionamiento político previo de los votantes. En última instancia le sirve para retener a sus propios votantes un tanto desencantados. Será necesario entonces que el gobierno trabaje en esas otras cuestiones que fueron mencionadas como principales preocupaciones y que no necesariamente están relacionadas con el manejo de la pandemia para llegar mejor posicionados a septiembre.

Bolivia | Dos de cada cinco personas son pobres y más de una de cada diez es indigente

Economía

Como resultado de la pandemia y sus secuelas, la pobreza extrema (personas con ingresos diarios por debajo de USD5,6 corregidos por paridad de compra, PPC) subió de 12,9% en 2019 a 13,7%, mientras que la pobreza moderada (USD11,9 PPC) subió de 37,2% a 39%, según la Encuesta de Hogares 2020 (EH2020). De esa forma, 200 mil personas de un total de 11,4 millones entraron nuevamente a la pobreza. Esta baja incidencia es explicada tanto por los programas de ayuda a la población vulnerable como al alto grado de informalidad que hizo que ellos reanuden sus actividades rápidamente. A su vez, los datos del mercado laboral son moderadamente alentadores porque la tasa de desocupación urbana en marzo cayó a 8,1%, desde un máximo de 11,6% en julio del año pasado, aunque permanece 2,4 puntos porcentuales por encima de similar mes. Sin embargo, la EH2020 revela que el empleo en empresas formalmente constituidas cayó de 585 mil a 400 mil unidades, a diferencia del empleo familiar y trabajadores por cuenta propia.

Política

La discusión política se centró incluyó una ampliación del alcance del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a los servicios digitales. El gobierno propuso esta modificación en línea con reformas similares y recientes en otros países. El proyecto fue rechazado por la opinión pública; y la oposición planteó la idea de crear tributos a la producción de coca y al sector informal, afines al gobierno. Por otra parte, hubo discusión sobre la reactivación del tramo ferroviario entre Arica y La Paz. Esta vía estuvo deshabilitada por 16 años y se estuvo haciendo una prueba técnica para rehabilitarla. En ese caso, a lo más un 10% de la carga de exportación no tradicional (principalmente agroindustrial) podría haber sido viabilizada por este medio. Pero eso equivaldría a una caída de similar magnitud en el transporte carretero. En tal sentido, los transportistas han bloqueado las vías troncales del país, consiguiendo hasta el momento que no se reactive esta vía de comercio exterior.

Venezuela | Exportaciones no petroleras a USA más de un 90% abajo de los niveles de 2019

Economía

El presidente Nicolás Maduro indicó que, debido a la presente ola de contagios y muertes por COVID-19, comenzará a activarse otro paquete económico para ayudar a los venezolanos a sobrellevar las medidas de confinamiento radical exigidas por las autoridades.

El nuevo reporte mensual de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) revela que los niveles de producción reportados para Venezuela se elevaron el pasado marzo hasta los 578 miles de barriles diarios (kb/d), según fuentes primarias, y 525 kb/d, según fuentes secundarias.

En el área no petrolera, según la Cámara Venezolano-Americana de Comercio e Industria (VenAmCham), las exportaciones de Venezuela a EE. UU alcanzaron en 2020 los USD 168 MM, lo que representa una disminución de 91,33% en comparación con los USD 1.765 MM exportados en 2019. Por otro lado, las importaciones provenientes de esa nación se ubicaron USD 1.131 MM en el mismo año, lo que representa un recorte de 11,07% respecto a los USD 1.272 MM adquiridos en 2019.

Política

A inicios de abril, el Comité de Postulaciones de la Asamblea Nacional publicó el listado de los 38 candidatos elegidos para optar por el cargo de rector del Consejo Nacional Electoral (CNE), organismos a cargo de regular y aplicar los procesos electorales en el país, luego de haber sido evaluadas sus postulaciones

Por otro lado, Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, anunció que el Gobierno ya completó el 50% del pago para adquirir vacunas contra el COVID-19 a través del mecanismo COVAX. Según Rodríguez, será adquirida una vacuna aprobada por el comité científico del Poder Ejecutivo. La vicepresidenta afirmó que dicho mecanismo brindará el acceso a 11.374.400 dosis para vacunar a 20% de la población venezolana. La suscripción al mecanismo cuesta USD 120 MM y se han depositado hasta ahora 59,2 millones de francos suizos, equivalentes a USD 64 MM.

Paraguay | La ganadería y la construcción lideran la recuperación económica

Economía

Estimaciones preliminares del Banco Central del Paraguay (BCP) muestran que, al primer trimestre de 2021, el Indicador Mensual de la Actividad Económica del Paraguay (IMAEP) registró una variación acumulada de 0,7%. Si bien el IMAEP no refleja totalmente al Producto Interno Bruto (PIB), permite adelantar su trayectoria. Entre los sectores que lideran la recuperación económica del país se encuentran ganadería; construcción; y algunas ramas de la manufactura. En efecto, hay destacar el desempeño favorable observado en la ejecución de las obras públicas y privadas; y la producción de carne; lácteos; molinería y panadería; productos metálicos y metales comunes; entre otras. Contrariamente, la agricultura y generación de energía eléctrica evidenciaron resultados desfavorables.
Por su parte, en igual período, las ventas comerciales acumularon una variación de 5,3%. En el sector comercial persiste la contracción en las ventas de hiper, supermercados, distribuidoras y otros (1,8%), mientras que se mantiene cierto dinamismo en las ventas de materiales de construcción (14,9%) y servicios de telefonía móvil (5,9%). Finalmente, destaca una recuperación en la venta de equipamiento del hogar (11,4%); vehículos (9,6%) y combustible (4,5%).

Política

Paraguay enfrenta la segunda ola de la pandemia de la COVID-19, con alrededor de 2.500 casos y 100 fallecidos por día, en un contexto de escasez de medicamentos y vacunas; saturación del sistema de salud; y fuerte demanda de cobertura por gastos médicos. Lo anterior llevó al presidente a promulgar una Ley que establece que los recursos de los fondos sociales de las entidades binacionales Itaipú y Yacyretá se destinarán a la compra de insumos; materiales de bioseguridad; mejora de la infraestructura hospitalaria; y protección social.
De igual forma, se anunciaron nuevas medidas de apoyo a los sectores de entretenimiento; gastronómico; eventos; hotelería; y turismo. Entre ellas, un subsidio de 50,0% en el consumo de energía eléctrica y agua potable, para el lapso julio – diciembre de 2021; reducción de 50,0% en el pago del IVA por concepto de alquiler de locales comerciales, entre mayo y octubre de 2021; fortalecimiento del Fondo de Garantía del Paraguay (FOGAPY), para préstamos a pequeñas y medianas empresas; y kits de alimentos para trabajadores informales de dichos sectores.

Perú | Recuperación mayor a la esperada

La pandemia y la economía

Respecto de la pandemia, nos encontramos saliendo de la segunda ola del covid-19. La serie de exceso de fallecidos (medida a través del Sistema Nacional de Registro de Defunciones, que compara los fallecidos desde marzo de 2020 respecto al mismo periodo de 2019) muestra una franca desaceleración de las muertes diarias. Se espera que continúe su descenso y alcance mínimos a mediados de julio. No obstante, no se descarta una eventual tercera ola, con mayor probabilidad de ocurrencia durante el último trimestre del año. Aunque el proceso de vacunación, que se aceleraría durante los próximos meses, mitigaría su impacto.

Finalmente, la economía se viene recuperando a un ritmo por encima de lo esperado. En el primer trimestre de 2021 creció +3.8% interanual. Por el lado de los sectores, el principal eje dinamizador fue la construcción (+40.6% en el mismo periodo). Se espera que dicha recuperación continúe en los próximos meses, llegando a tasas cercanas al 40% en el segundo trimestre de este año, producto del efecto estadístico al compararse contra el periodo de confinamiento de 2020. No obstante, sería atenuada parcialmente por efecto de la incertidumbre política y la prolongada precarización del empleo, sobre todo en Lima Metropolitana. El crecimiento al cierre de este año y el de 2022 va a depender de qué candidato gane la segunda vuelta. Si la opción promercado se impone, se espera un rebote del PBI de 10.1% en 2021 y un crecimiento de 4.7% en 2022.

Política

La incertidumbre política continúa de cara a la segunda vuelta electoral a disputarse el próximo 6 de junio. Si bien el ánimo en los mercados ha mejorado, debido a que Keiko Fujimori, del partido de Fuerza Popular (derecha conservadora), ha acortado la brecha de intención de voto que la distanciaba de Pedro Castillo, del partido de Perú Libre (izquierda radical), el riesgo de que gane la opción antisistema aún es alto.

Por otro lado, el nuevo Congreso tendrá un rol determinante, en cualquier escenario. Las alianzas que puedan generar los candidatos, según su afinidad política, les permitiría evitar algún intento de vacancia (figura constitucional que permite destituir al presidente con dos tercios de los votos). Sin embargo, no serían suficientes para emprender grandes reformas (pensiones, mercado laboral, entre otras). Esto no necesariamente es algo negativo, ya que serviría como barrera frente a medidas nocivas en caso tome el poder la opción antisistema.

Monitor Quincenal de Crisis

Acceda a nuestro Monitor Quincenal de Crisis para conocer las proyecciones por escenarios para 2021 del PBI, Consumo Privado, Inflación, Tipo de Cambio Oficial y Brecha Cambiaria.

A su vez, debido a la relevancia de la evolución de la situación sanitaria para el funcionamiento económico, encontrará un tablero de seguimiento de la vacunación contra el COVID-19 , donde se analiza dicha evolución a nivel nacional e internacional.

Haga clic en “VER INFORME” para acceder al reporte que publicamos quincenalmente. El mismo también lo podrá encontrar en Actividad-Informes Corporate.