Economía
El primer trimestre concluyó con un crecimiento, estimado preliminarmente, en 1,8%, el peor desde el segundo cuarto de 2017. En términos desestacionalizados, el crecimiento anualizado se frenó a 0,4%, pero con una fuerte influencia de la minería, que se contrajo casi 20% en igual forma de medición. Las lluvias del invierno altiplánico explicaron este resultado, que debería revertirse en los próximos meses. La actividad no minera creció 2,5% respecto del primer trimestre de 2018 y 2,8% trimestral desestacionalizado y anualizado. La meta oficial, recientemente revisada a 3,5% desde 3,8%, parece muy difícil de cumplir. Un 3% parece más probable, toda vez que los datos sectoriales y otros muestran cierta debilidad en el consumo y algún freno en la inversión, lo mismo que un nivel pesimista de expectativas de los consumidores y neutral de los inversionistas. El crédito parece haber detenido su crecimiento, aunque sigue razonablemente elevado, mientras las remuneraciones están dando señales de recuperación. Esto podría traducirse en un repunte del consumo en los próximos meses.
Política
Los errores no forzados siguen caracterizando la gestión del Presidente Piñera, aunque en menor medida que en su primer gobierno. En el reciente viaje a China, donde se firmaron diversos acuerdos, afirmó que “cada país se da el gobierno que quiere”, haciendo la vista gorda con la dictadura en ese país. Además, lo acompañaron en el viaje dos de sus hijos que participaron en algunas reuniones oficiales. Todo esto opacó la visita y ha sido aprovechado por la oposición para tapar sus propias inconsistencias y errores. La popularidad del Presidente se ubica en 35% y eso lo desestabiliza y lo impulsa a la sobre exposición. Además, el desprestigio ha ido carcomiendo cada vez más instituciones del país lo que ya alcanza un volumen peligroso por los mensajes que entrega y la sensación de impunidad que queda. Es un hecho complejo al que hay que darle solución a la brevedad, pero los responsables no parecen estar a la altura. En lo legislativo es un año movido: reformas tributaria, previsional, laboral y de salud, ya en discusión en el Congreso.